El Congreso chileno está tramitando un proyecto de ley que impulsará con fuerza el uso de la firma electrónica.Sin embargo, se requiere de una regulación moderna en protección de datos y modernización del Estado para masificar su aplicación, algo en lo que coincidieron los expertos invitados al seminario “Firma Electrónica Avanzada, sus alcances e implicancia en el desarrollo de la economía digital” que organizó Sinacofi en conjunto con BPO Advisors.
El seminario contó con la participación del presidente de la Asociación de Bancos e Instituciones Financieras (Abif) y presidente del directorio de Sinacofi, José Manuel Mena, quien ante un centenar de asistentes afirmó que “la Firma Electrónica Avanzada es una herramienta que nos puede posibilitar seguridad en el actuar, mayor calidad en el servicio y una transaccionalidad más, en beneficio de los millones de clientes de la industria financiera. El principal desafío es que esta herramienta esté al alcance de las empresas y de los clientes”.
“En un entorno cada vez más digital, la mayoría de las empresas ofrecen a sus clientes la posibilidad de realizar operaciones en línea. Hoy tenemos la posibilidad de contratar diversos productos financieros en una gama muy amplia de canales, sin la necesidad de concurrir físicamente a una sucursal. Esto implica un sistema de confianza, seguridad y transparencia para el cliente. Tanto el sector público como el privado, en conjunto, debemos trabajar en esa confianza para que la economía pase a ser un elemento sustantivo y presente en nuestra vida cotidiana. De esta manera, podremos dar el paso para que Chile esté en el siglo XXI”, afirmó Mena.
En tanto, el gerente general de Sinacofi, Fernando Contardo, abordó la importancia de la implementación de la Firma Electrónica Avanzada y sus beneficios en seguridad y eficiencia, destacando el “cumplimiento de las regulaciones, agilidad en los procesos, atención permanente a los clientes, elimina riesgos operacionales que surgen de la identificación de clientes, elimina riesgos operacionales que surgen del suministro de información entregada por el cliente, minimiza las posibilidades de errores por digitación de datos, mejoras en la sustentabilidad, ya que reduce huella ambiental, mejora en la experiencia de clientes, aumenta la imagen de seguridad y privacidad de nuestros clientes y reduce los costos de proceso, almacenaje y transporte de documentos”.
Además, Contardo destacó que la adquisición de Sinacofi de la participación mayoritaria de BPO Advisors “permitirá generar importantes sinergias entre los servicios propios de ambas compañías, ya que los servicios conjuntos de firma electrónica avanzada de BPO Advisors y la verificación de identidad de Sinacofi, asegurarán la identidad del firmante y la trazabilidad del proceso de firma, generando un documento digital irrepudiable, sellado electrónicamente y que contará con los más altos estándares de seguridad”.
El seminario contó con panel de conversación conformado por los senadores Felipe Harboe y Kenneth Pugh; la abogada experta de Derecho Digital, Lorena Donoso y el gerente de Operaciones y Tecnología en Banco Ripley, Américo Becerra; y moderado por el gerente general de BPO Advisors, Marcelo Mora.
El senador Felipe Harboe abordó los alcances de la firma electrónica en torno a la protección de datos personales y destacó que la firma digital permite acelerar y simplificar los procesos, por tanto, una correcta implementación dará mayor certeza a estos procedimientos electrónicos.
Además, afirmó que hay tres puntos que deben ser resueltos en el actual proyecto de ley: la recaudación tributaria, la vida útil de los pagarés electrónicos y los costos. “Hay un conjunto de temas que el proyecto de ley de hoy en día no se hace cargo (…) cuando uno habla de firma electrónica y habla de digitalización de procesos, está hablando de entrada y salida de información. Por tanto, hay que hacerse cargo de la seguridad de la transacción”, dijo Harboe y agregó que “en la lógica del dato personal, la firma electrónica si logra tener resueltos estos problemas, mi percepción es que va a dar mayor certeza y va a evitar que haya terceros que intervengan en el proceso de la emisión y recepción de esos datos”.
El senador Kenneth Pugh complementó que “la tecnología ayuda, el tema es como la usamos. Es fundamental que Chile se ponga a la vanguardia en este tema, porque si somos un país seguro, que apuesta a esta transformación digital con ciberseguridad, vamos a atraer inversión. No solo necesitamos estabilidad política, también necesitamos tener una estabilidad digital que asegure que las empresas quieran venir”.
Por su parte, la abogada experta de derecho digital, Lorena Donoso, afirmó que la “Firma Electrónica Avanzada, tiene una importancia muy crítica desde el punto de vista de la ciberseguridad y la seguridad es la base de la economía digital. Cuando uno tiene certeza de que los actos jurídicos han sido válidamente constituidos, da más tranquilidad a todos los negocios futuros y al ciclo de vida contractual. En este tipo de instancia lo importante es evangelizar a la gente para que sepa que tiene esta herramienta y que la puedan utilizar para los efectos de poder dar mayor impulso a la economía digital”. Además añadió que si bien la ley es fundamental para dar certezas y aportar seguridad, con la actual legislación ya se puede operar.
Finalmente, el gerente de Operaciones y Tecnología en Banco Ripley, Américo Becerra, abordó la experiencia desde el caso práctico y destacó que “la Firma Electrónica Avanzada garantiza la identidad de la persona, que el documento sea irrepudiable y permite agilidad y seguridad en los procesos”.
Asimismo señaló que el foco de los bancos es de cara al cliente, por lo que, la aplicación de esta permite que ellos tomen la decisión que quieran de forma remota y certera sin tener que moverse físicamente. “La aplicación de la Firma Electrónica le entrega a los clientes beneficios en temas de seguridad, certeza, agilidad y satisfacción”: