Generali Global Infrastructure (GGI), firma independiente de gestión de activos especializada en inversiones en infraestructura dentro del Grupo Generali, ha anunciado el lanzamiento de dos fondos de infraestructuras para apoyar la recuperación europea. En opinión de la firma, los activos de infraestructura son fundamentales para dar forma a una recuperación sostenible y resistente para Europa, junto con un mundo más ecológico, más digital y centrado en las personas.
Según explican, los fondos tienen por objeto apoyar la recuperación de las economías europeas de los efectos adversos del COVID-19, mediante inversiones resistentes y sostenibles en infraestructuras y ofrecen una asignación flexible tanto en deuda como en renta variable. Los dos fondos, cada uno de ellos con un objetivo de entre 400 y 700 millones de euros, se han puesto en marcha en octubre 2020 con una inversión inicial de 290 millones de euros por parte del Grupo Generali, 145 millones de euros para cada fondo. Ambas estrategias de inversión también son accesibles para los inversores institucionales fuera del Grupo Generali que busquen inversiones con un impacto positivo y que a la vez ofrecen rendimientos atractivos y estables.
El equipo de inversión de GGI seleccionará inversiones brownfield y greenfield con una capacidad distintiva para contribuir a la recuperación de las economías europeas, así como de contribuir a los Objetivos de Desarrollo Sostenible de Naciones Unidas. Ambos fondos están alineados con la trayectoria climática diseñada por el Acuerdo de París. Según destaca la firma, “ambos fondos representan un paso más en la definición del Grupo Generali de soluciones de inversión para apoyar la recuperación de las economías europeas”.
Más concretamente, uno de los fondos se centra en la transición energética, el medio ambiente y la movilidad sostenible, y el otro en la transición digital y las infraestructuras sociales. La gestora considera que los ámbitos geográficos y los sectores a los que se dirigen “ofrecen una gama muy amplia de oportunidades de inversión”, lo que permite a GGI construir carteras diversificadas y ser muy selectivo centrándose en la generación de rendimientos financieros y extrafinancieros.
El sector de la infraestructura generó globalmente 657 mil millones de dólares de inversiones en 2019 en operaciones de renta fija y variable, lo que ofrece una gran diversidad de oportunidades de inversión privada en todos los instrumentos, sectores y geografías. Europa confirmó su posición de liderazgo con más de 220 mil millones de dólares de proyectos en 2019.
«El Pacto Verde Europeo implica un esfuerzo renovado para acelerar la transición ambiental y social, generando impactos positivos a largo plazo en la vida de los ciudadanos y las empresas en Europa. La contribución de las infraestructuras será estratégica en esta vía de desarrollo, aportando fuertes beneficios sociales y económicos a la sociedad. Los nuevos fondos GGI confirman el papel central que las inversiones sostenibles tienen en nuestra estrategia de Grupo, destinado el capital hacia proyectos de alta calidad y de impacto positivo», ha señalado Timothy Ryan, CEO de Generali Asset Management.
En palabras de Philippe Benaroya, CEO de Generali Global Infrastructure, “la actual crisis representa una oportunidad para que los gobiernos aceleren unas inversiones ambiciosas en los ámbitos de la energía y la transición social, canalizando el capital para hacer nuestras economías y sociedades más resistentes y sostenibles. La infraestructura es una clase de activo con carácter anticíclico muy establecido, y una de las pocas capaces de asociar el capital público y privado para lograr efectos financieros y extrafinancieros positivos a largo plazo. Esta clase de activos será una estrategia relevante para los inversores que busquen inversiones resistentes, que proporcionen un rendimiento valioso en un escenario de tipos de interés bajos”.