La gestora austríaca Erste Asset Management ha registrado el fondo de renta variable global Erste Green Invest, para su comercialización en el mercado español. Se trata de un producto que busca un impacto tangible y medible en el medioambiente y la sociedad, a través de las inversiones financieras. La iniciativa nace fruto del intenso enfoque ESG de la gestora en todo su proceso de inversión.
Erste Green Invest aprovecha las ventajas de las nuevas tecnologías que operan en los ámbitos de la energía, el agua y el reciclaje, así como las de la transformación estratégica de compañías tradicionalmente intensivas en recursos y energía que transitan hacia su conversión en proveedores de soluciones, por ejemplo en el área de servicios energéticos o tecnológicos.
La transición desde la vieja economía hacia una economía sostenible, es otro de los factores clave en la estrategia del fondo. “Creemos que la sostenibilidad no es sólo un término que está de moda, más bien, está en línea con nuestra convicción de que los factores medioambientales y sociales mejoran el binomio rentabilidad/riesgo para nuestros clientes en el largo plazo”, índica Heinz Bednar, CEO de Erste Asset Management.
En la actualidad, el fondo cuenta con un patrimonio cercano a 150 millones de euros y, a pesar de su escaso track-record, ya ha sido galardonado con el sello de calidad del Forum de Inversiones Sostenibles (FNG), que es el equivalente a Spainsif en el ámbito de los países de habla alemana: Suiza, Austria, y Alemania.
Según el proveedor de servicios financieros MSCI, las compañías centradas en la gestión sostenible han mostrado un alto grado de resistencia durante la crisis, superando el comportamiento de sus comparables con una gestión tradicional. “Las compañías que materializan el enfoque sostenible en sus actividades, están asumiendo las tendencias que van a dominar el futuro. De este modo, evitan los riesgos actuales y futuros, y logran retornos sostenibles para nuestros clientes”, explica Bednar.
Erste Green Invest es un ejemplo de ello. El fondo está gestionado por el equipo de gestores de Erste WWF Stock Environment, lanzado en el 2001, que ha logrado un comportamiento excepcional, superando el rendimiento de numerosos fondos sostenibles muy consolidados en el mercado.