El gobierno uruguayo considera que tendrá necesidades en financiamiento en 2019 por valor de 3.143 millones de dólares, con un fondeo proyectado en los mercados de bonos locales e internacionales de unos 2.950 millones de dólares, según un informe oficial al que tuvo acceso el diario local El País.
Las autoridades uruguayas «continuarán explorando oportunidades para diversificar las monedas del subportafolio de deuda denominado en divisas de países avanzados (dólares, euros y yenes), de manera de mejorar el perfil de riesgo de la misma y reducir la carga esperada de intereses de deuda».
Además, «se buscará ampliar los vínculos con potenciales inversores de Asia, ya sea para fomentar su participación en las emisiones globales en dólares, o a través de otros mecanismos de financiamiento en los mercados asiáticos».
El informe también señala que se buscará “desarrollar junto al Banco Central y otros operadores del mercado, mecanismos que faciliten el acceso de no residentes al mercado de títulos locales».
En el mercado local, seguirá colocando deuda en Unidades Indexadas (UI), en la recientemente creada Unidad Previsional (UP) y «en la medida que las condiciones de mercado así lo permitan» en pesos nominales. Además quiere «continuar avanzando en la conversión a pesos de otros préstamos multilaterales denominados en dólares, en la medida que las condiciones de mercado así lo propicien».
El déficit fiscal en Uruguay se sitúa entre el 4% y 5% del PIB, lo que representa entre 2.110 millones de dólares y 2.411 millones de dólares.