El ahorro financiero (activos financieros) de las familias españolas a finales de septiembre 2015, según datos del Banco de España, ha totalizado 2,005 billones de euros, lo que supone una ligera reducción del 1,8% en el tercer trimestre (de 37.523 millones). En los nueve primeros meses de 2015, el volumen de activos financieros de los hogares ha experimentado un incremento del 0,5% (10.497 millones de euros).
Casi el 70% de la reducción del saldo del trimestre se debió al ajuste de valor de su cartera de activos, mientras que el otro 30% correspondió a flujos netos negativos, resultado de los rendimientos negativos del mercado en el tercer trimestre, que condicionó a los hogares a la desinversión en activos financieros (12.026 millones en el tercer trimestre).
No obstante, en el conjunto de 2015, la adquisición de nuevos activos continúa siendo positiva (14.726 millones, segunda mayor cifra a tercer trimestre desde 2007) debido al impulso de las instituciones de inversión colectiva (fondos y sociedades de inversión e IICs extranjeras), que a septiembre de 2015 acumulaban 24.220 millones de suscripciones netas.
Esas cifras compensaban la desinversión en otros activos (destacando la amortización de más de 46.300 millones en depósitos a plazo realizada por las familias españolas en 2015) En total, casi 1.200 millones salieron de depósitos en 2015 (de enero a septiembre) y más de 13.700 de inversión directa, mientras los fondos de inversión se configuran como el instrumento elegido por los hogares españoles para canalizar su ahorro el año pasado, dice Inverco.
Es más, su ahorro en fondos supone al 12,3% del total del ahorro financiero, un nivel no visto desde 2005, mientras los depósitos sitúan su peso en el nivel más bajo desde 2007.
Así, por tipo de activo, las IICs (fondos y sicavs, y IICs extranjeras) lideran el incremento del saldo de activos financieros (15,4% en tasa interanual y 9,1% en 2015).
Aunque los pasivos financieros volvieron a reducirse en el tercer trimestre (12.773 millones), no fue suficiente para compensar la disminución de activos, por lo que la riqueza financiera de las familias (activos menos pasivos) retrocedió ligeramente y se situó en 1,218 billones de euros. En términos porcentuales sobre el PIB, el ahorro financiero neto de las familias españolas alcanza el 113,9%, frente al 65,0% en diciembre 2008.