Como miembro de la iniciativa Net Zero Asset Managers (NZAMI) creada en diciembre de 2020, AXA Investment Managers (AXA IM) se ha comprometido a apoyar el objetivo de cero emisiones netas de gases de efecto invernadero (GEI) para 2050, en línea con los esfuerzos globales para limitar el calentamiento global a 1,5°C (cero emisiones netas para 2050 o antes).
Como los firmantes deben compartir sus progresos individuales con la NZAMI antes de la COP 26, AXA IM ha informado de que 137.000 millones de euros de los activos que gestiona están en vías de alcanzar el nivel net zero para 2050 o antes, lo que representa el 41% de todas las acciones y bonos corporativos cotizados, así como los activos inmobiliarios directos gestionados.
“Informamos por primera vez sobre nuestro viaje hacia el net zero y en unas semanas, durante la Cumbre Mundial del Clima en Glasgow, compartiremos más detalles sobre cómo pretendemos no sólo apoyar, sino acelerar la transición hacia un mundo bajo en carbono. Esto incluirá nuestros objetivos provisionales y nuevos y ambiciosos compromisos”, señala Marco Morelli, presidente ejecutivo de AXA IM.
Según destaca Morelli, mientras que la acción climática sigue siendo un esfuerzo colectivo entre los responsables políticos, las empresas, los Gobiernos y los inversores, “en AXA IM creemos firmemente que podemos marcar la diferencia asignando cada vez más capital a las empresas y proyectos que se dedican a apoyar el objetivo de alcanzar las emisiones netas de gases de efecto invernadero para 2050 o, cuando sea posible, antes”.
En línea con esta visión, AXA IM ha tomado una serie de medidas para contribuir a la transición hacia un mundo bajo en carbono como, por ejemplo, abandonar todas las inversiones en carbón en los países de la OCDE para 2030 y, en el resto del mundo, para 2040. Además, se ha propuesto que su gama de productos sea más verde, incluyendo el lanzamiento de nuevas estrategias centradas en el carbono, ampliando aún más una cartera de inversiones verdes y la creación de una familia de fondos «ACT» para categorizar sus fondos ESG más centrados para ayudar a los clientes a identificar fácilmente estos fondos y tener claros los criterios.
También es relevante su objetivo es que, al menos, el 50% de los activos bajo gestión inmobiliarios directos estén alineados con la trayectoria de 1,5° para 2025 utilizando las vías de objetivos CRREM (Carbon Risk Real Estate Monitor).
La gestora explica que además tiene previsto mejorar su implicación (engagement) con 319 empresas en 2020, con un 27% de esos compromisos relacionados con el cambio climático y un 18% con los recursos y los ecosistemas. Por último, se ha comprometido a trabajar en equipo con AXA para evaluar la metodología de inversión alineada con París y definir objetivos alcanzables. “El Grupo AXA se ha comprometido en 2020 a reducir en un 20% las emisiones de CO2 de las inversiones aplicables, entre 2019 y 2025. Este objetivo se revisa periódicamente en línea con el protocolo de la Alianza de Propietarios de Activos Netos Cero (NZAOA)”, explican desde AXA IM.