Deutsche Bank tiene como objetivo prioritario para los próximos años el convertirse en una de las cinco mejores entidades en wealth management a nivel mundial, según un reciente comunicado del grupo, después de haber perdido terreno con respecto a sus principales rivales en los últimos años.
Fabrizio Campelli, jefe global de la división de wealth management, no reveló los detalles de cómo el banco alemán planea llevar a cabo su objetivo, pero comentó que entre las prioridades estaba invertir en minimizar los riesgos en “un ambiente regulatorio y de control desafiantes” e invertir en un modelo operativo moderno.
En 2012, Deutsche Bank se fijó el objetivo de convertirse uno de los cinco mejores bancos en wealth management, pero su clasificación bajó de la posición 8 a la 12, entre 2012 y 2014, según Scorpio Partnership, especialista en investigación de mercados y consulta estratégica.
Los últimos rankings de 2014, situaban a UBS, Morgan Stanley, Bank of America, Credit Suisse, y Royal Bank of Canada como los cinco mejores bancos en este ámbito a nivel mundial.
Grandes desafíos
John Cryan, que fue nombrado co-CEO de la mayor entidad financiera alemana en julio, está sometido a la presión de reinventar Deutsche Bank, luchando por terminar una serie de costosas acciones legales por escándalos del pasado y adaptarse a una regulación bancaria mucho más estricta.
Deustche Bank ha estado reestructurando su modelo de negocio, no sólo separando su banca de inversión en dos, si no también dividiendo el negocio de wealth management en una unidad dedicada en exclusiva a los clientes de muy alto patrimonio, y otra enfocándose exclusivamente en clientes institucionales y fondos.
Deutsche Bank ha transferido cerca de 340.000 millones de euros en activos bajo gestión desde la banca privada, que hasta ahora era parte gestión de activos y patrimonios, a su división de banca comercial.