Para afrontar con mayor solvencia las consecuencias derivadas de la crisis sanitaria y económica del COVID-19, las empresas están poniendo el foco en la protección de la salud, el bienestar financiero y las aspiraciones profesionales de sus empleados. Según el informe anual de Mercer, Global Talent Trends 2020 (Tendencias Globales de Talento), las grandes compañías buscan, a través de estas iniciativas, impulsar el rendimiento de sus empleados durante la previsible recesión económica y prepararlos para un mercado laboral del futuro dominado por la inteligencia artificial y la automatización de los procesos.
“Dado que el 63% de los responsables de recursos humanos prevén un estancamiento de los sueldos, las empresas deberán incorporar otros estímulos para salir airosas de los tiempos de incertidumbre que se avecinan”, aseguran desde la consultora. En su quinta edición, el informe se centra en “ganar mediante la empatía” y concluye que, aquellas empresas con una estrategia para mejorar la salud y el bienestar de sus empleados, pueden ser hasta cuatro veces más productivas. En consecuencia, el compromiso de los empleados, incentivado por su proyección de carrera en una corporación que vela por su bienestar, aumenta exponencialmente su rendimiento en el trabajo. Es decir, al mejorar la experiencia de los trabajadores se impulsa su rendimiento, y con ello su cuenta de resultados. “Es el momento de planificar un futuro próspero, impulsar la formación e integrar las nuevas tecnologías”, añaden desde Mercer.
“Los resultados del estudio de este año dejan claro que la transformación de la función de recursos humanos es un componente clave para crear una organización sólida y sostenible. Para las empresas es clave encontrar el equilibrio entre economía y empatía en todas las decisiones que conciernen a las personas, y más aún después de la incertidumbre provocada por la pandemia global”, subraya Juan Vicente Martínez, líder de área de Career en Mercer.
Además, y en función de los datos obtenidos, Mercer identifica cuatro tendencias clave que “marcarán el futuro de las estrategias de capital humano en los próximos años”.
En primer lugar señala que es necesario mejorar la experiencia del empleado. Desde Mercer señalan que una tendencia es centrar la estrategia de capital humano en crear una experiencia relevante para la carrera profesional de sus empleados se ha convertido en la prioridad número uno de los responsables de recursos humanos. Los encuestados entienden que es necesario inspirar y estimular a los profesionales para que aumente la cuenta de resultados. Así, más de la mitad de las empresas está reorganizando sus procesos para centrarse en las personas.
“Las corporaciones necesitan trabajadores motivados por el cambio, más flexibles y deseosos de aprender nuevas capacidades. No crear el ambiente adecuado puede provocar la fuga de un talento cada vez más necesario”, subraya el informe. Si bien aún existe cierto escepticismo en lo referente a la experiencia del trabajador, solo el 27% va retorno en esta inversión, el 48% de las organizaciones ya considera un factor primordial cuidar de la salud y el bienestar de sus empleados. No obstante, la mayoría de los encuestados, un 71% aún no ha implementado estrategias en este campo.
En todo caso, desde Mercer aluden a la importancia de que los departamentos de personal abandonen su tradicional función administrativa y se conviertan en un departamento estratégico, clave para fomentar la atracción, retención y creación de talento, así como para diseñar entornos laborales estimulantes.
En segundo lugar identifica como tendencia el velar por un futuro próspero. “Ya no basta con atender a los criterios de accionistas e inversores, sino también se debe tener en cuenta los intereses de todos los actores implicados”, asegura el informe. Así, los directivos empiezan a ser conscientes de que el éxito de su organización depende de cómo incorporan factores ambientales, sociales y de buen gobierno (ESG) para ser más sostenibles y estar alineados con la conciencia social.
Sin embargo, a pesar de que el 85% de las empresas está de acuerdo con este nuevo modelo y el 68% ha incorporado ya este propósito en su agenda, solo el 35% de las empresas afirma haber incorporado factores ESG.
En lo que concierne a su futuro laboral, el 72% de los empleados de mayor edad afirma su pretensión de trabajar más allá de la edad de jubilación, algo que reducirá las oportunidades laborales para los trabajadores pertenecientes a la Generación X. Por ello, desde Mercer apuntan a que las empresas necesitarán estrategias para gestionar la longevidad laboral y crear valor para los empleados más jóvenes.
La tercera de las tendencias según Mercer es impulsar el aprendizaje, algo que consideran fundamenta. Desde Mercer advierten que la transformación global de la economía y de los procesos de trabajo está provocando una revisión integral de las capacidades que requieren las empresas. Sin embargo, el 40% de las organizaciones aún no sabe con certeza qué habilidades específicas necesitarán para afrontar el mundo laboral del siglo XXI.
Por otro lado, el 78% de los empleados asegura estar preparado para aprender nuevas competencias y habilidades para mejorar su productividad, aunque el 34% confiesa no disponer de tiempo necesario para llevarlas a cabo. Frente a estos datos, el informe subraya que más del 60% de los responsables de recursos humanos aún no ha invertido en una estrategia de formación y readaptación de fuerza laboral.
Por último el informe habla de integrar intuición y ciencia en la gestión de los recursos humanos. La aplicación de herramientas de inteligencia artificial y análisis predictivo es cada vez más necesaria para diseñar estrategias de atracción de talento y detección de habilidades. Desde 2016 el uso de estos mecanismos se ha cuadruplicado, pasando del 10% al 39% actual, según los datos de Mercer. Sin embargo, la consultora afirma que “aún no se aprovecha todo su potencial en el ámbito de la gestión de plantillas”. Así, sólo el 43% de las organizaciones las utiliza para identificar qué empleados abandonarán la empresa o se jubilarán (41%).
Asimismo, son aún menos las compañías que recurren a estas herramientas para evaluar su estrategia salarial (18%) o para sopesar entre adquirir, formar o externalizar el talento necesario (15%). No obstante, en lo referente al compromiso de sus empleados, un 62% de las empresas ya las utiliza para analizar estas tendencias.
“Si bien es cierto que los robots superan a las personas en tareas relativas al procesamiento de datos, el factor humano sigue siendo necesario en recursos humanos para verificar el buen sentido de los análisis y asegurar que todas las decisiones están sustentadas en la ética”, añaden desde la gestora.
Este informe refleja las prácticas laborales de más de 7.300 encuestados, entre los que se encuentran directivos, directores de recursos humanos y empleados de compañías en 16 países dedicadas a nueve sectores distintos. Los encuestados han respondido a cuestiones relacionadas con la automatización y la inteligencia artificial, la diversidad y longevidad, la reconfiguración de las dinámicas de trabajo y el papel que desempeñan los equipos de recursos humanos en todo este contexto.