Sus padres son los líderes de Wall Street, profesionales de éxito y multimillonarios, pero, ¿se aplicaría a sus hijos el refrán “de tal palo tal astilla”? ¿Habrán seguido los pasos de sus progenitores o en un afán de rebeldía e independencia, habrán desarrollado sus propios talentos?
Business Insider ha investigado a los herederos de los “peces gordos” del centro financiero neoyorquino para saber en que ocupan su tiempo.
Alexander Soros, hijo del financiero, inversionista y filántropo George Soros, ha seguido las pasos de su padre y dedica la mayor parte de su tiempo a la beneficencia dentro de la organización Jewish Funds for Justice. En 2009 inauguró su propia fundación, Alexander Soros Foundation, orientada a promover la justicia social y los derechos humanos.
Los hijos de Lloyd Blankfein, CEO de Goldman Sachs, son ilustres alumnos de Harvard. Alex ha fichado como consultor en Bain & Company, firma fundada por el republicano y candidato a la presidencia Mitt Romney.
Parece que sus papás si se esfuerzan por que sus hijos vayan a las mejores universidades. Matt Dalio, hijo del multimillonario gestor de hedge funds y fundador de Brigdewater Associates, Ray Dalio, pasó también por las aulas de Harvard. A sus 29 primaveras Dalio Jr es el CEO de la compañía tecnológica Endless Mobile y además con tan sólo 16 años fundó China Care Foundation, dedicada a ayudar a niños huérfanos con necesidades especiales. ABC News le nombró “Person of the week” en 2004.
La hija de otro CEO, en este caso de JP Morgan, Laura Dimon, revolucionó las redes sociales con su artículo “El último tabú para la Mujeres”, publicado en The Daily Beast, dónde relataba con mucha gracia las dificultades de las mujeres para excusarse a la hora de ir al baño a “hacer de vientre”. Dentro de sus actividades más serias, Laura trabaja como profesora de Periodismo en la Universidad de Columbia.
También hay hijos de padres famosos en Wall Street, pero por razones no muy deseables. Nell Diamond tuvo que dejar su puesto de trabajo en Deutshe Bank tras el escándalo del Líbor, cuyo padre, Bob Diamond fue más que salpicado. Esto le costó a su progenitor la dimisión como banquero de Barclays. Eso si, la señorita Diamond se despachó a gusto al invitar a los políticos ingleses a través de Twitter, a que le tocaran su miembro (aunque inexistente, por motivos obvios) viril masculino (“hold my dick”).
Hijos de CEOs, gestores de hedge funds, banqueros, todos se abren camino, fiel a los pasos de sus progenitores o en dirección opuesta, pero parece claro que el hecho de tener un papá “billonario”, magnate del gigante financiero de Wall Street abre algunas puertas, ¿o no?