El 89,09 % de los consultores tributarios y empresarios de Argentina consideran que la presión tributaria será mayor o igual en 2024 que el año pasado consultados afirmó que será igual o mayor (mayor el 63,64% e igual el 25,45%). De hecho, olo el 10,91% cree que será menor, según los resultados de la encuesta anual de KPMG Argentina.
La mirada de los encuestados en cuanto al agravamiento de la presión fiscal en la economía se ha mantenido muy
alta en los últimos 5 años. De todos modos, y si bien se observa una mirada predominantemente
pesimista, el porcentual de quienes avizoran una mayor presión fiscal pasó de un 84% en la
proyección del año 2023 a un 64% para el año 2024.
KPMG Argentina realizó su encuesta anual de impuestos titulada “Impacto de los impuestos en la actividad económica y en los negocios desde la visión de las empresas”. Fueron consultados 58 CFO´s y especialistas impositivos de empresas medianas y grandes de todo el país correspondientes a los sectores financiero, construcción, telecomunicaciones, logística, energía, agroindustria, manufacturero y comercial, entre los más importantes.
La encuesta se realizó entre el 22 de febrero y el 6 de marzo.
En otro orden de cosas, el 65,45% de los empresarios respondieron que mantendrán la inversión en el país; el 29,10% que la
disminuirá y solo el 5,45% que la aumentará. Aun con un cambio de administración gubernamental, no se advierte en las respuestas cambios respecto a las opiniones que esta misma pregunta receptaba el año pasado. El 96,36 % de los encuestados advierte poco o ningún incentivo fiscal de parte de las provincias para atraer inversiones productivas a sus territorios.
Los consultados se definieron por un orden de prioridad de posibles iniciativas fiscales gubernamentales para facilitar decisiones de inversión en Argentina. Lo más votado fue replantear la figura del impuesto sobre los Ingresos Brutos. Este gravamen no parece ser elegido por casualidad. En el resto de las preguntas de la encuesta, así como en las encuestas de años anteriores, aparece también como el más determinante en la conformación de precios de bienes y servicios, y el que genera mayor preocupación por la acumulación de saldos a favor crónicos. Este tema tiene una especial actualidad por cuanto en la agenda de la
convocatoria a un nuevo contrato social conocida como “Pacto de Mayo” se incluye como punto 4 a una Reforma Tributaria y en el punto 5 un nuevo Régimen de Coparticipación.
En segundo término, los encuestados consideraron a la iniciativa de disminuir el impacto del Impuesto a los Débitos Créditos en cuenta bancaria permitiendo que el mismo sea pagado a cuenta de otros gravámenes de manera total. En tercer lugar, las respuestas expresaron la necesidad de contar con un marco de previsibilidad fiscal por 10 años sin aumentos de gravámenes nacionales y provinciales.
“Este año la encuesta se realizó en un marco donde las problemáticas fiscales, el rol y tamaño del Estado, y el replanteo de la dimensión del gasto público tienen un gran protagonismo en el debate político y económico argentino. Ese contexto los resultados representan un aporte para el análisis de cuál será la carga fiscal que permita sustentar estos nuevos lineamientos desde la mirada
mayoritaria de la ciudadanía. Es de esperar que el debate impositivo tenga cada vez más espacio y pluralidad por lo que la divulgación de la visión de quienes invierten contribuirá al objetivo de tener un sistema tributario sustentable y que promueva el crecimiento económico”, explica Fernando Quiroga Lafargue, socio de Impuestos Corporativos de KPMG en Argentina y responsable de la encuesta.
Las conclusiones de la muestra de este año ofrecen una visión autorizada al tratarse de referentes de compañías de primera línea cuyas decisiones de inversión suelen resultar significativas en el crecimiento, empleo y formalización económica. También profundiza la percepción que tienen las empresas en cuanto al desempeño de las autoridades fiscales y la justicia en el ámbito tributario.