El Patronato de la Fundación Ibercaja acordó hace unas semanas designar presidente de la misma a Amado Franco Lahoz, presidente de honor de Ibercaja. Quien fue presidente del Consejo de Administración de la caja y del banco recoge el testigo de Honorio Romero, director de la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, y que pasa a ser desde hoy vicepresidente de la misma Fundación Ibercaja.
En la misma sesión, se han incorporado como patronos Manuel Pizarro, presidente de Ibercaja entre 1995 y 2004, vicedirector de la Económica y académico de Número de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, y José Luis Rodrigo Molla, director general de la Fundación Ibercaja hasta el pasado mes de octubre.
La Fundación Ibercaja es una de las más importantes de España. Nacida de la transformación de la antigua caja de ahorros, durante sus tres años de vida ha tenido como misión administrar su participación en Ibercaja Banco (87,8% del accionariado) y el Monte de Piedad, y revertir en la sociedad los beneficios obtenidos en ambas entidades financieras, a través de la Obra Social.
Con el relevo acordado, la Fundación Ibercaja da continuidad a los planteamientos con los que se creó, inspirados en los valores de la entidad fundadora, la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, de trabajar por el desarrollo territorial y preservar su compromiso con la sociedad.
El Patronato ha agradecido a Honorio Romero su generosa y desinteresaba labor durante su presidencia, en la que ha mantenido vivos con su ejemplo diario los valores de la Real Sociedad Económica de Amigos del País, entidad fundadora de la caja. En su mandato, Honorio Romero ha traído al presente el espíritu de los ilustrados de trabajar por el interés general, el fomento del desarrollo territorial, el crecimiento económico y el bienestar social.
Un referente en el sector financiero español
El nuevo presidente de la Fundación Ibercaja, Amado Franco Lahoz, dejó la Presidencia de Ibercaja Banco el pasado 24 de febrero por decisión propia tras una brillante trayectoria en esa institución, a la que accedió por oposición en 1970. Licenciado en Económicas y Derecho por la Comercial de Deusto, desarrolló toda su vida profesional en la Entidad. Se incorporó en el Servicio de Estudios y fue, sucesivamente, subdirector-interventor general (1978), director general adjunto (1985) y director general (1987), puesto que ocupó durante 17 años hasta que, en 2004, accedió a la Presidencia.
En 2011, con la creación de lbercaja Banco y el traspaso de la actividad financiera al mismo, fue nombrado presidente. Y en 2014, con la conversión de la caja en fundación bancaria, fue elegido presidente de la misma, responsabilidad en la que cesó en marzo de 2016 para centrarse exclusivamente en el banco. El pasado 24 de febrero renunció a esta última responsabilidad y el Consejo de Administración lo nombró presidente de honor de la entidad.
Como director general, Franco Lahoz impulsó el cambio de imagen a partir del cual se lanzó la expansión y creó el grupo financiero. Ya como presidente, en 2004, y tras suceder a Manuel Pizarro, la entidad completó su implantación nacional y más que duplicó el volumen de actividad. Se anticipó al cambio de ciclo económico con medidas como el freno al crédito promotor, que permitió, pese al tsunami financiero, asegurar el futuro.
Amado Franco es presidente de CASER y vocal de las fundaciones Princesa de Girona y Santa María de Albarracín. En 2011 recibió la medalla Pro Mérito del Consejo de Europa y, en 2013, el Premio Aragonés a la Trayectoria Profesional. En 2005 fue nombrado Hijo Predilecto de Zaragoza y en 2008, Hijo Adoptivo de Azuara (Zaragoza). El pasado mes de junio recibió tres máximos reconocimientos: la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo que concede el Gobierno de España; la Medalla de Oro de la Cámara de Comercio, Industria y Servicios de Zaragoza, y la distinción Paul Harris del Rotary Club.
Nuevos patronos
En la misma sesión se ha designado como patrono a quien fuera presidente de Ibercaja entre 1995 y 2004, etapa en la que, junto a Amado Franco, sentaron las bases del ciclo de gestión que dotó a la caja de las fortalezas que le han permitido superar la crisis. La incorporación de Manuel Pizarro, que es presidente de honor de Ibercaja, vicedirector de la Económica y Académico de la Real Academia de Jurisprudencia y Legislación, entre otros, es un nuevo aval para el Patronato, integrado desde su creación por distintas personalidades de acreditada trayectoria personal y profesional.
También se ha incorporado José Luis Rodrigo Molla, director general de la Fundación Ibercaja hasta octubre, cuando se jubiló después de una intensa y fructífera labor en la caja y el banco, y en la institución en la que ha culminado su vida laboral.