Los activos alternativos y mercados privados suponen un soplo de aire fresco para las carteras, en términos de rentabilidad pero también de descorrelación y diversificación con respecto a los activos tradicionales. Las oportunidades en estrategias como el crédito privado, el real estate o, dentro de los activos cotizados, crédito flexible con estrategia global macro o long/short, quedaron claras en el marco del I Funds Society Investment Summit Alternativos, celebrado el pasado 12 de septiembre en Toledo en el Hotel Eurostars Palacio Buenavista.
En el evento, las gestoras Natixis Investment Managers, M&G Investments, DPAM y Katch Investments presentaron sus estrategias para un entorno complejo en el que siguen planeando fantasmas de desaceleración económica y teniendo protagonismo los bancos centrales. En este artículo resumimos dos de ellas, centradas en el crédito privado (M&G) y la renta fija cotizada, pero con estrategias alternativas (Natixis IM).
Crédito privado en formato ELTIF: la apuesta de M&G
Uno de los sectores donde los expertos ven más oportunidades es en crédito privado, y en M&G –que empezó a invertir en alternativos ya a finales de los años 90, siendo de los primeros inversores europeos en sectores como el de préstamos corporativos- consideran que es un buen momento para posicionarse en crédito de empresas privadas (préstamos y bonos emitidos por compañías que no cotizan en bolsa), algo que ofrece a los inversores diversificación frente a los mercados cotizados.
“M&G empezó en 1999 a invertir en mercados privados, ofreciendo diversificación, y manteniendo fuertes relaciones con bancos, asesores y firmas de private equity. Nos centramos tanto en la parte cotizada como no cotizada de las empresas, vemos el momento del ciclo y tratamos de optimizar la estructura de capital”, explicaba Aramide Ogunlana, especialista de inversiones en estrategias de crédito privado de la gestora. Y añadía: “Hemos de ir más allá de la cartera 60-40: el mercado privado puede ofrecer beneficios equilibrados en términos de riesgo-retorno a un asset allocation tradicional. Pero se trata de un perfil complementario: la próxima generación de inversión no trata de reemplazar la liquidez, sino que vemos los mercados privados como un añadido”.
Al hablar del crédito privado, la experta contextualizó el tamaño del universo de inversión: “A menudo se piensa que los mercados de crédito privado son pequeños, pero el mercado de leveraged loans y notas flotantes, con 470.000 millones de euros, supera en tamaño al de bonos high yield en Europa (350.000 millones), mientras el direct lending suma 220.000 millones”. Es cierto que los mercados privados son un aún una pequeña parte del universo de financiación (de 260 billones, suponen un 4% frente al 44% de las acciones globales y del 52% de los bonos globales), pero podrían doblar su peso en los próximos años, defendió.
Y es que la situación en EE.UU. y en Europa es similar, con la existencia de numerosas firmas de tamaño pequeño y mediano, familiares y que no cotizan en los mercados públicos: “Solo el 0,2% de las compañías en Europa son de gran tamaño”, recordaba la experta. Y un dato más: de todas las empresas con ingresos superiores a 100 millones de euros, el 96% son privadas, no cotizadas.
Además, las compañías se quedan en ese estado “privado” durante más tiempo, tardan más en salir a cotizar, lo que hace vaticinar que será el capital privado el que financie la próxima generación de negocios líderes. “El nivel de IPOS se ha reducido a la mitad, debido a la financiación que ofrecen los mercados privados y con los bancos restringiendo la financiación a estas compañías”, recordó. Un escenario que da idea de las oportunidades que pueden encontrarse en el universo del crédito privado. “Las fronteras de la financiación en deuda son dinámicas y M&G tiene la experiencia para trabajar en todo el espectro”, desde leveraged loans y notas flotantes, a direct lending y préstamos sindicados. Segmentos en los que la selección resulta clave.
Ogunlana, que matizó que invertir en crédito privado no significa invertir en pequeñas compañías, presentó el fondo M&G Corporate Credit Opportunities ELTIF, una estrategia lanzada en noviembre de 2023 que pretende aprovechar las mejores ideas en el ámbito de los préstamos corporativos líquidos e ilíquidos y ser flexible a las condiciones del mercado, creando valor en diferentes ciclos. Así, una de las claves del fondo es la flexibilidad, con capacidad para ajustar los pesos según vean mejores oportunidades en los universos de préstamos sindicados, direct lending y crédito privado. Eso sí, el fondo se centra en la inversión en crédito senior, el que se sitúa en los primeros puestos de la línea de prelación, y descarta apalancamiento (actualmente el rating medio es B, más del 90% de la cartera está en instrumentos flotantes y el 79% está en crédito privado líquido). Además, la estructura de ELTIF –apta para el inversor minorista- permite un mayor acceso a instrumentos de crédito privado, y cuenta con el pasaporte europeo.
Se trata de una estrategia con limitada liquidez (mensual para suscripciones y trimestral para reembolsos), con inversiones a largo plazo, y que pretende obtener retornos de Euribor +5%-6% a medio plazo (bruto de comisiones) y que cuenta con potenciales yields del 7%-9% (la perspectiva es ofrecer un retorno bruto anual cercano al 8%), ofrece rentas (a través de los bonos flotantes, con baja duración) y es gestionada con la experiencia de las más de 50 personas que componen el equipo de M&G en crédito privado, que han invertido en el activo durante más de 25 años.
Natixis IM: estrategias alternativas en renta fija
Con una propuesta centrada en los mercados cotizados, pero con estrategias no tradicionales, participó en el Summit Natixis IM, que defendió las ventajas de gestionar renta fija de forma flexible y presentó dos estrategias que invierten en este activo. “Presentamos dos estrategias de renta fija con un componente de retorno absoluto para buscar un plus de rentabilidad en un escenario en el que las alternativas líquidas han perdido un poco el interés de la mano de las bajadas de tipos, reduciendo el atractivo de las alternativas sin riesgo”, decía Jaime Botella, Sales Manager de Natixis IM.
DNCA Credit Conviction es un fondo de crédito flexible. En el proceso de inversión, el equipo trata de buscar la diversificación en varios activos de este segmento: crédito, bonos del estado, Coco AT1 (máx 20%), bonos convertibles (máx 15%), y diversificación internacional en euro, dólar y activos denominados en libras esterlinas. Todo, con una estrategia de gestión discrecional activa, con un rango de duración de entre -3 y +7. El equipo se centra en construir una cartera investment grade con margen de maniobra en activos high yield (de media un 30%) y capacidad para aprovechar oportunidades a nivel global (hasta un 49% del NAV puede tener una calificación mínima de B-). Ismael Lecanu, Portfolio Manager del fondo y su cogestor, Jean-Marc Frelet, eran los responsables del AXA WF € Credit Total Return Fund hasta junio de 2023.
Se trata de una estrategia alternativa con dos motores de rentabilidad: el stock picking y la gestión de la duración, que no presenta direccionalidad con el mercado y los índices. Al invertir en crédito europeo, el equipo piensa en euros, pero puede encontrar valor en EE.UU. o Reino Unido y, aunque el equipo selecciona compañías, donde más centran sus esfuerzos es en el análisis top-down y su gestión del riesgo. La asignación es flexible para adaptarse a distintos entornos de mercado, si bien la duración se gestiona de forma más táctica con futuros y el riesgo de crédito a través de CDS. En cuanto a la exposición, el 61% de la cartera está en deuda senior, el 24% en subordinada (bancos, aseguradoras…), incluyendo también deuda convertible, resumía Botella.
Por su parte, DNCA Alpha Bonds es un fondo de renta fija flexible que busca valor dentro del universo de la deuda a nivel global con un objetivo del 2% sobre el mercado monetario. La estrategia -con mas de 11 años de track record y gestionada por el mismo equipo desde su origen- ha conseguido aportar rentabilidad positiva ha los inversores de manera consecutiva desde su lanzamiento. Se trata de una estrategia global macro, defensiva, descorrelacionada de los índices tradicionales de renta fija y gestionada con un exhaustivo limite de control de riesgo (volatilidad ex ante ≤ 5%). El equipo encuentra en las estrategias de inflación, tipos reales, nominales, curva y forex los contribuidores a la rentabilidad del fondo. La duración se mueve entre menos tres y más siete años. “Hay un posicionamiento long-short en bonos de gobiernos de economías del G-10”, explicaba Botella, pues se trata de buscar valor en renta fija de manera no tradicionales. Actualmente están cortos en Europa frente a EE.UU., positivos en inflación (“será más pegajosa de lo estimado”) y realizan ciertas apuestas sobre emergentes y el empinamiento de la curva de tipos.
“La mayoría de estrategias que componen la cartera están vinculadas a la evolución de los bonos de gobierno. A pesar de ello, la diversificación de las fuentes de retorno consigue que la evolución del fondo no esté correlacionada con los índices tradicionales de renta fija, reduciendo la volatilidad total de las carteras y añadiendo consistencia en los resultados”, añadía Botella, como resumen.
En la presentación, Javier García de Vinuesa, Country Manager de Natixis IM para Iberia, destacó las capacidades de Natixis IM en los mercados alternativos y privados e hizo un repaso de la situación y tendencias de la industria. Así, destacó la importancia de tener escalabilidad a la hora de gestionar activos privados, y también especialización, más allá del desarrollo del private equity, requisitos con los que cuenta la plataforma de Natixis IM, que se nutre de 13 gestoras que se encuentran entre las mejores del mundo.
García de Vinuesa habló también de la superación del modelo 60-40 y el desarrollo imparable de la industria de gestión de activos, de la “expansión” del crédito privado y los flujos hacia estos mercados no cotizados, de la “moda del private equity” y del papel de la tecnología en este segmento del mercado. Sin olvidar el camino hacia la democratización, que continúa adelante con algunas tensiones, como las de los fondos semilíquidos. “Las carteras cada vez son más completas en mercados privados y más complejas”, añadía.
El experto destacó también algunas tendencias clave en el sector: “Hay varias cosas que estamos promoviendo: los emerging managers, gestores que están montando su primer fondo tras experiencia en gestoras muy grandes (en términos de rentabilidad-riesgo es muy interesante porque en las primeras hornadas las rentabilidades suelen ser muy superiores, es la reinvención de la industria); los data centers vinculados al super computing, existen muy pocos en el mundo; y también trabajamos con fondos evergreen que, dependiendo del cliente, tienen una proporción diferente entre activos líquidos o ilíquidos”.