Una de las vertientes del private equity en la que Tikehau Capital invierte de forma creciente en los últimos años es la ciberseguridad, que enmarcada en el área de seguridad y defensa se ha convertido en una pieza clave para el futuro de las democracias europeas, señaló en un desayuno en Madrid Augustin Blanchard, Executive Director y Gestor de la Estrategia de Private Equity en Ciberseguridad.
Blanchard presentó junto a Christian Rouquerol, co-Head de Tikehau Capital Iberia & Head of Sales Iberia & LatAm, un barómetro sobre la financiación de la ciberseguridad en Europa. “En Tikehau Capital gestionamos 500 millones de euros en activos en ciberseguridad, lo que nos convierte en el mayor inversor focalizado en ciberseguridad en Europa”, explicó Blanchard. El vehículo para ello es la estrategia Brienne, que va por su segunda añada y que cuenta con un fondo paralelo con formato español (Tikehau Ciberseguridad Private Equity II FCR, registrado en CNMV en octubre del año pasado).
“Lo hacemos como inversor de private equity growth, en software de ciberseguridad en el continente, lo que significa que invertimos de 10 a 50 millones de euros en empresas de rápido crecimiento y software B2B. No nos centramos en servicios ni consultoría, sino que invertimos en productos que tardan tres o cuatro años en desarrollarse y luego venderse. Y que por ello necesitan capital extra para crecer”, indicó.
El mercado de la ciberseguridad está dominado por Estados Unidos, por lo que es necesario que Europa diseñe sus propios sistemas, tanto por motivos comerciales como estratégicos, tal como puso de manifiesto hace unos días la presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, quien propuso movilizar «cerca de 800.000 millones» para la defensa en la UE, lo que incluye a las tecnologías para la seguridad digital.
“Las amenazas a la ciberseguridad han aumentado drásticamente en los últimos 10 años debido a la creciente vulnerabilidad de nuestras economías, cada vez más digitales, y debemos responder”, señaló Blanchard.
De las redes a las aplicaciones
El sector está viviendo en la actualidad un cambio de ciclo, desde la protección de las redes y terminales hacia la de las aplicaciones digitales, que son las que están en la diana de los atacantes en la actualidad. La estrategia ha invertido desde 2019 en compañías de rápido crecimiento en Europa, 10 francesas y 6 de ellas de otros países, entre ellas la española Build38, con sede en Barcelona y que se especializa precisamente en seguridad para aplicaciones móviles.
Blanchard añadió que el objetivo del fondo es invertir en “empresas como mínimo entre 1 y 5 millones de euros en ingresos recurrentes y llevarlas si es posible al umbral de los 50 millones de euros. Después de entre 5 y 8 años, las volvemos a vender a actores europeos o a fondos de capital riesgo, para que podamos devolver el dinero a nuestros inversores”.
Un sector más maduro
Respecto de la evolución del sector en el barómetro que publica anualmente la gestora, tras un 2023 de parálisis en cuanto a la captación de fondos, en 2024 se produjo un nuevo incremento en un mercado más maduro, ya que si bien el número de operaciones se redujo un 14%, el nivel total de inversión aumentó en un 30% a nivel global. Es decir un incremento muy considerable de los montos captados en cada ronda.
El líder indiscutible del mercado es Estados Unidos, pero el mercado europeo de ciberseguridad se ha multiplicado por 1,6 en la última década en términos de número de operaciones de captación de fondos, y por 12,6 en lo que respecta a los montos captados.
Blanchard destacó asimismo que en el último año se han adquirido 134 empresas de ciberseguridad en Europa, y el 71% de ellas han sido compradas por actores europeos, lo que demuestra la existencia de una importante demanda, tanto en financiación como a la hora de las salidas. Lo que se ve además incrementado por el empeoramiento de las relaciones con Estados Unidos, que subraya la necesidad de crear alternativas propias: “Muchas más empresas europeas van a comprar ciberseguridad europea”.
El experto añadió asimismo que la misma regulación europea también tiene el efecto de que sólo los productos de ciberseguridad de Europa pueden realmente hacer frente a la demanda normativa, que incluye numerosos requerimientos, desde el reglamento GDPR a DORA.
Por su parte, Rouquerol explicó que la primera añada de la estrategia Brienne III se lanzó en 2019 y cerró en 2022 con un total de 175 millones de euros bajo gestión. “A finales de 2023, iniciamos la recaudación de la siguiente añada, para el que Tikehau aporta el 15% del tamaño total del fondo. Nuestro objetivo es llegar a 350 millones de euros, por lo que casi se duplica el tamaño del primer fondo”, dijo. Existe asimismo una versión del fondo para el mercado español con las mismas compañías del fondo francés, pero adaptado al inversor minorista, Tikehau Ciberseguridad Private Equity II FCR.