El año llega a su fin y las gestoras hacen balance de sus principales unidades de negocios. Desde M&G destacan que su división de activos privados y alternativos, de 65.000 millones de libras esterlinas, desplegó más de 11.500 millones de libras esterlinas en los 12 meses hasta el 30 de noviembre de 2021.
La gestora señala que esta división, con un historial de inversión en mercados privados de más de dos décadas y más de 150 años invirtiendo en el sector inmobiliario, desplegó el capital a través de numerosos y diversos mercados, incluyendo la financiación apalancada, el capital inmobiliario no cotizado, el capital de infraestructuras no cotizado, la financiación inmobiliaria, los valores privados respaldados por activos y los libros de préstamos al consumo e hipotecas.
Su gran actividad en estos últimos 10 meses demuestra la importancia que los inversores le están dando a las inversiones alternativas. “Está claro que la pandemia no ha frenado las tendencias predominantes de los mercados de préstamos, que están cada vez más diversificados tras la gran crisis financiera. En Europa, el sistema bancario sigue manteniendo alrededor del 75% de los activos crediticios en relación con el PIB, lo que sigue siendo significativamente superior al nivel de Estados Unidos, y esperamos que esta cifra disminuya en un contexto de endurecimiento de la normativa bancaria. Esto está creando importantes oportunidades para los fondos de pensiones y las compañías de seguros que buscan diversificación y una rentabilidad potencialmente ajustada al riesgo en áreas como las hipotecas residenciales y los grupos de préstamos al consumo, mientras que los bancos conservan las relaciones y dan servicio a los consumidores finales”, señala William Nicoll, director de Inversiones de Activos Privados y Alternativos de M&G.
Evaluando estos últimos meses, Nicoll considera que la sostenibilidad se está convirtiendo en un motor clave en los mercados, también en el de estos activos. “Algunos inversores están asignando capital para abordar los mayores retos a los que se enfrenta nuestra sociedad, especialmente en relación con la salud del planeta y el cambio climático, así como con cuestiones sociales como la inclusión financiera. Esto es especialmente frecuente en nuestras inversiones en activos reales, como los bienes inmuebles y las infraestructuras, donde podemos apoyar las necesidades cambiantes de la sociedad al tiempo que ofrecemos una rentabilidad sostenible a los inversores”, añade.
Según reconoce este responsable de inversiones en M&G, es cierto que la pandemia del COVID-19 ha tenido un importante impacto en el consumo, lo que les obligó a dedicar parte de sus recursos a comprender cómo se vieron afectadas las empresas. “También, dedicamos nuestros recursos a asegurarnos de que las compañías se capitalizaban adecuadamente para sortear las turbulencias operativas que siguen persistiendo”, afirma.
Pero hoy es un día para pensar en el futuro y, sobre ello, Nicoll añade: “Para los inversores pacientes y a largo plazo con capacidad para adoptar la tecnología y la complejidad, innovar en mercados en evolución y ser ágiles cuando surgen oportunidades, los mercados privados son un lugar apasionante».
Los éxitos de M&G
En respuesta a estas tendencias de mercado, M&G ha protagonizado importantes hitos a lo largo de este año. Por ejemplo, el lanzamiento de Catalyst, que invierte hasta 5.000 millones de libras esterlinas en empresas de propiedad privada en las que se necesita capital para impulsar la innovación y el impacto para crear un mundo más sostenible. “El equipo de inversión, compuesto por 25 personas y con sede en el Reino Unido, EE.UU., India y Singapur, está desplegando el mandato en nombre de millones de clientes invertidos a través del fondo Prudential With Profits Fund, de 143.000 millones de libras”, destacan desde la gestora.
Además, su equipo de inversión inmobiliaria directa destinó casi 3.000 millones de libras esterlinas, de los cuales más de 1.000 millones se destinaron a la región de Asia-Pacífico, donde la empresa lleva invirtiendo activamente desde 2002. Según indica, esto incluye: el establecimiento de una nueva asociación para desarrollar una cartera inmobiliaria australiana que invierte en el sector logístico, en nombre de un cliente externo; y el lanzamiento en el sector de la propiedad compartida en el Reino Unido para crear inicialmente más de 2.000 nuevas viviendas asequibles y de diseño sostenible, mediante el establecimiento de una asociación estratégica con Hyde Housing.
Por último, Infracapital, la división de capital de infraestructuras que no cotiza en bolsa, recaudó 1.500 millones de euros de los inversores para su última estrategia de inversión en zonas verdes. “Más del 50% del capital ya está asignado a empresas que están a la vanguardia de la transición energética o la conectividad digital”, concluyeb desde M&G. Entre ellas se encuentran
Su apuesta por el negocio de los activos privados y alternativos es clara. De hecho, a lo largo de este año, el equipo de Financiación Especializada se asoció con Finance Ireland para introducir por primera vez en el mercado irlandés hipotecas a largo plazo a tipo fijo. Además, la gestora ha trabajado la internacionalización de sus capacidades en el ámbito de la inversión privada directa en la India, Chile y la República Checa. Una dinámica que continuará el próximo año, al igual que el desarrollo de herramientas ESG propias.