Banco Santander ha creado Santander Green Investment, una nueva plataforma para adquirir e invertir en proyectos de energías renovables que se encuentran en fase de desarrollo y construcción. Bajo esta iniciativa, impulsada por la división de Corporate & Investment Banking (CIB), Banco Santander ya ha adquirido de diferentes promotores participaciones en nueve proyectos de tecnología solar fotovoltaica y eólica en España que suman una potencia total de aproximadamente 500 MW.
Santander Green Investment dispone de un modelo de gobierno autónomo y su Comité de Inversión tiene plenas facultades para autorizar inversiones, dotando a esta plataforma de la agilidad necesaria para la toma de decisiones en un entorno de mercado como el actual. Además, el marco de inversión prevé la concesión de las garantías financieras que se exigen durante el proceso de tramitación de este tipo de proyectos, así como la asociación con promotores con contrastada experiencia en el desarrollo de proyectos de energías renovables.
“El lanzamiento de Santander Green Investment es una apuesta por nuestras capacidades de negocio y por nuestro conocimiento del sector. Esta iniciativa contribuye a reforzar el liderazgo de Banco Santander en el sector de las energías renovables, dando un paso más en nuestro compromiso con la transición hacía una economía neutra en carbono», comenta Ignacio Domínguez-Adame, responsable de Santander CIB en Europa Continental.
De este modo, Banco Santander pone en el mercado una nueva herramienta que permitirá acelerar el desarrollo de proyectos renovables y dinamizará la inversión en este tipo de activos. Banco Santander es líder en financiación de energías renovables, con un volumen movilizado de 65.700 millones de euros entre 2019 y 2021. Al cierre del último ejercicio, Banco Santander fue el primer banco del mundo en Project Finance de Energías Renovables[1] y había emitido tres bonos verdes por importe de 3.000 millones de euros.
Además, Banco Santander ha anunciado su ambición de alcanzar cero emisiones netas de carbono en todo el grupo en 2050 para apoyar los objetivos del Acuerdo de París sobre el cambio climático.
Para conseguirlo y facilitar la transición a una economía baja en carbono, Banco Santander alineará en 2030 su cartera de generación de energía eléctrica al Acuerdo de París y, para ese año, habrá dejado de dar servicios financieros a clientes de generación de energía eléctrica cuyos ingresos dependan en más de un 10% del carbón térmico. En 2030, además, el banco eliminará por completo su exposición a la minería de carbón térmico en todo el mundo.
[1] #1 por número de proyectos según el Bloomberg Clean Energy Index y #3 por volumen según Dealogic Wind and Renewable Fuels