Éste es el año de la renta fija, pero eso no está quitando «momentum» a los activos privados. Para Casilda Pérez- Medina, Sales Director de Real Assets en Aquila Capital -gestora especializada en la gestión de activos reales, renovables, infraestructura e inmobiliario sostenible-, ambas clases de activo son un complemento perfecto para perfilar carteras más defensivas en momentos en los que la renta variable sufre… como ahora. En esta entrevista con Funds Society, defiende la democratización y el acceso al inversor minorista y explica los sectores en los que ahora ve mejores oportunidades: energía renovable y eficiencia energética, con la ESG como bandera. La experta nos habla de su oferta de producto, que tiene la particularidad de que son fondos abiertos, e incluye además un fondo de impacto que invierte en bosques. Y nos cuenta sus planes de crecimiento, en España y en el resto del mundo.
El boom de los activos alternativos y privados: ¿es algo firme o el reciente interés por la renta fija ante la subida de tipos podría ponerlo en peligro, sobre todo entre minoristas? Es decir, ¿la renta fija quita «momentum» a los activos privados?
El tipo de inversor que invierte en nuestros fondos es un perfil institucional (fondos de pensiones, aseguradoras, fondos de fondos, private equities, compañías, family offices, endownments …) por lo que no puedo hablar sobre el impacto a inversores minoristas. Sí que opinamos que este año es el año de la deuda, con cierto menoscabo de las valoraciones en las carteras de renta variable, que se verán penalizadas por los cambios en las valoraciones. Pero si tenemos que hablar de entrar en nuevos activos, creemos que es el año de la renta fija.
En este sentido, nos encontramos en un momento de dislocación del mercado: los inversores volviendo la mirada nuevamente a las infraestructuras por ejemplo, porque son valores más seguros, en los que los períodos de inversión son relativamente largos y por tanto, se muestran más resilientes ante los vaivenes del mercado o del corto plazo. No creo que peligre el interés por los activos alternativos, por el contrario, creo que ambas clases de activo son un complemento perfecto para perfilar carteras más defensivas en momentos en los que la renta variable sufre.
¿Qué valoración hace de la reciente legislación que permite al minorista invertir en activos privados a partir de 10.000 euros, aunque siempre bajo asesoramiento y con ciertas condiciones?
Si miramos las inversiones totales en fondos de capital riesgo en España, el año pasado sumaron 8.735 millones de euros al cierre de año, lo que supone un 15% más que el año anterior, según datos de SpainCap. Por ello vemos que la Ley responde a unas necesidades y tendencias en el ámbito tanto español como europeo. Creemos que todo avance en la regulación que democratice el acceso a la inversión y fomente la educación del inversor minorista es un paso hacia adelante en la industria y que beneficia en última instancia a todos los jugadores que formamos parte. Siempre estamos atentos a cómo evoluciona la legislación y creemos que, siempre que se contemplen todos los escenarios y se priorice la protección al inversor y los partícipes, es una noticia positiva.
Dentro de los activos privados, ¿dónde vislumbra mayores oportunidades actualmente, en qué segmentos (private equity, deuda privada, infraestructuras, real estate…)?
Aquila Capital somos una gestora especializada en la gestión de activos reales: renovables, infraestructura e inmobiliario sostenible. Es en estos sectores donde estamos más enfocados y donde tenemos una especialización de más de 20 años. Dicho esto, creemos que actualmente podemos encontrar muy buenas oportunidades en el sector de generación de energía renovable y eficiencia energética. Especialmente en aquellas tecnologías ya probadas, donde su supervivencia no depende de ayudas externas y su uso está ampliamente extendido.
También es especialmente importante el factor ESG: creemos que esta tendencia ha venido para quedarse. Observamos que cada vez hay más demanda de estas tecnologías de energía renovable, que, además, en general es un sector que ofrece una alta rentabilidad; son inversiones a largo plazo y con una alta estabilidad. También el escenario futuro es prometedor para el sector. Para llegar a ser 100% renovables en 2050 en Europa hay que invertir unos 80 Bn de euros al año en el desarrollo de energía eólica y solar, además de incrementar la capacidad instalada de 20 a 57 GW al año. No hay suficiente inversión por ahora, gran parte de toda la inversión necesaria tendrá que aportarla el sector privado, y ahí es donde gestoras como nosotros jugamos un papel fundamental.
Aquila Capital está muy enfocada a proyectos de energía renovable e inmobiliario: qué pueden aportar estos sectores a las carteras de los inversores, en términos de rentabilidad, riesgo…?
Los fondos de Aquila Capital siguen una estrategia Core-Core Plus, invierten en su mayoría en activos operacionales y con ingresos contractuales, de una manera diversificada. Esto permite una visibilidad y estabilidad de los retornos esperados. Además, en contextos de mayor volatilidad de mercado, como el que estamos viviendo actualmente, las valoraciones de nuestros fondos apenas se están viendo afectadas, por lo que constituyen una clase de activo más defensiva. Por otro lado, el consumo de capital de nuestros fondos suele relativamente más bajo, por lo que el retorno ajustado al consumo de capital es atractivo. Por último y no menos importante, nuestros fondos tienen una clasificación alta según la taxonomía europea.
¿En total cuántos fondos gestionáis y queréis ampliar este rango en el futuro?
Actualmente gestionamos casi 15.000 millones de euros bajo gestión a nivel global. Aproximadamente 12.000 millones están dedicados a la transición energética y la generación de energía renovable.
Los fondos que ofrecemos a inversores españoles son:
- Aquila Capital Infrastructure Fund, que es un híbrido de un fondo de fondos de infraestructuras
- European Renewable Balanced Fund, que es un fondo diversificado de activos renovables en Europa, con una estrategia de inversión enfocada en activos renovables operativos con una diversificación triple (por tipo de tecnología, por tipo de remuneración y por geografía)
- Aquila Capital Southern European Logistics fund, un fondo centrado en la inversión en activos logísticos sostenibles en toda la zona sur de Europa
Seguiremos trabajando para ampliar nuestros productos y por tanto nuestra cuota de mercado.
Veo que vuestro fondo flagship invierte en tres tecnologías diferentes (eólica, solar, hidráulica): ¿cuáles son las claves de estas inversiones?
Nuestro fondo más grande, European Renewable Balanced Fund, incorpora estas tres tecnologías, lo que nos permite balancear el riesgo a través de la triple diversificación que comentaba anteriormente. Estas tres tecnologías (además de los sistemas de almacenamiento) comprenden todo el espectro de mecanismos y tecnologías dentro de la generación de energía renovable, como pueden ser las baterías y sistemas de almacenamiento, las propias plantas eólicas, hidráulicas y solares por todo Europa.
El fondo sigue una estrategia muy diversificada en este sentido, también por geografía (dentro de la zona euro) así como en el sistema de remuneración: tenemos tarifas reguladas, PPAs y spot, lo acceso a varios mercados de electricidad dentro de la UE. Además, un punto muy importante y diferencial de nuestra estrategia es que es un fondo abierto, cada trimestre llegan suscripciones. Hasta ahora hemos alcanzado aproximadamente los 600 millones de euros en unos dos años. Es un fondo que está funcionando francamente bien y estamos muy contentos de cómo se está comportando y del interés generado.
Tenéis también un fondo que invierte en bosques: ¿cómo pueden los bosques ofrecer rentabilidad a los inversores?
Este fondo es muy especial. Contamos con un equipo que se ocupa de la gestión forestal y que nos aporta el expertise necesario. Este equipo gestiona activamente los terrenos en el sentido de que contamos con una inversión en Nueva Zelanda, una en Finlandia y otra en Escocia, y tenemos un equipo en todas estas localizaciones, gestionando de manera proactiva cuándo se tala y cuándo y cómo se vende la madera. Además, y apalancando en nuestros equipos renovables aconsejan en las tecnologías que se pueden instalar en esos terrenos (por ejemplo, instalando pilones de generación eólica), lo que incrementa la rentabilidad y el valor de dichos activos. Es un fondo de impacto, con la máxima clasificación según la taxonomía europea.
En este punto, hay que hablar de sostenibilidad: ¿cómo de importante es en vuestra gestora y hasta qué punto es más fácil incorporarla en activos reales que en activos cotizados? ¿Vuestros fondos son artículos 8 o 9?
La sostenibilidad es parte del ADN de Aquila Capital, y es además una característica diferenciadora de nuestros fondos. Queremos desempeñar un papel clave en la transición energética con el objetivo de mitigar el cambio climático y acelerar la descarbonización de la economía de forma sostenible y rentable. No solo a través del desarrollo de plantas y de la creación de valor en toda la cadena de generación de energía renovable sino también a través de nuestras inversiones. La mayoría de nuestros fondos tiene clasificación Artículo 8 o 9 siguiendo la nomenclatura SFDR.
La iliquidez ha sido un tema clave, un hándicap para invertir en activos privados, pero sus fondos son abiertos, a diferencia de otros fondos de capital privado cerrados. ¿Qué ventajas tiene esto para los inversores, sobre todo en términos de libertad de entrada y salida, entiendo, pero también, cómo se equilibra la gestión de estos vehículos para permitir salidas y a la vez gestionar adecuadamente capital privado?
Nuestros fondos efectivamente son fondos abiertos. Esto significa que cada trimestre, abrimos una ventana de entrada para las suscripciones. Creemos que este tipo de fondos ofrecen grandes ventajas a los inversores en activos menos líquidos. No hay una preocupación sobre cuándo entrar en el fondo, porque las ventanas se abren con una regularidad determinada durante toda la vida del fondo. En cuanto a la gestión de la liquidez, los activos reales son difíciles de volver líquidos. Para gestionar adecuadamente este riesgo, contamos con un periodo de preaviso de, al menos, seis meses o más, porque volver líquido los tickets no es fácil y puede penalizar a los partícipes. Siempre estamos a la búsqueda del activo mejor, y siempre tenemos entradas. Esto nos da mucha más capacidad para buscar activos y estabilizar activos. Para que los inversores salgan hay que ofrecer un período más largo de permanencia claro, para que las posibles salidas no desbalanceen la cartera.
Sobre la compañía, la gestora tiene más de 20 años de vida, con sede en Hamburgo y presencia en toda Europa y diferentes países de Asia… ¿qué objetivos tiene la entidad en España? qué metas os marcáis en nuestro país en términos de negocio y crecimiento?
España es un país muy importante para el grupo. Tenemos fuertes inversiones en renovables así como en logístico e inmobiliario. La oficina de Madrid ha crecido mucho para responder a la gestión de una creciente cartera de inversión. En cuanto a la distribución de los fondos, también contamos con inversores españoles que son partícipes en nuestros fondos.
Vuestro principal inversor es institucional (aseguradoras, fondos de pensiones…) pero ¿también queréis llegar a otros segmentos, como banca privada, asesores o EAFs?
Efectivamente hasta ahora nuestra base inversora han sido inversiones institucionales, pero no descartamos acercarnos a la banca privada, inversor retail en un futuro. Analizaremos todas las oportunidades.
¿Cuáles son vuestros planes más internacionales?
Actualmente contamos con una presencia muy consolidada en Europa, donde tenemos equipos ‘on-the-ground’ donde están los activos. Nuestras oficinas están en España, en Portugal, Italia (Milán) y en Grecia (Atenas). También tenemos una presencia notable en Noruega, así como en Londres, Ámsterdam, Zúrich, Fráncfort y Singapur, donde tenemos equipos específicos para acompañar a nuestros inversores y a potenciales clientes. También estamos diversificando nuestra base inversora que es cada vez más internacional.