El principio fundamental del Blockchain es la contabilidad descentralizada, a través de la cual los participantes en la red aprueban, validan y registran las transacciones, en lugar de que la responsabilidad recaiga en una única entidad, como un banco o fideicomisario. Los participantes en la red, también conocidos como mineros (“miners”), validan y fechan colectivamente las entradas, lo que prohíbe los cambios no aprobados en los registros.
Tal y como el nombre Blockchain (cadena de bloques) sugiere, los datos de la transacción se almacenan en bloques o segmentos de datos. Los bloques son una serie de registros de transacciones que se validan en una remesa, y que después se encadenan o enlazan con otras transacciones aprobadas. Los bloques almacenan, registran y fechan las transacciones y, a continuación, las registran en el Blockchain global. Según crece el número de activos o transacciones en una red comercial, el nivel de confianza en el libro de contabilidad aumenta. Los activos que podrían ser rastreados utilizando esta tecnología incluyen activos materiales como casas, coches y terrenos, o activos intangibles como patentes, derechos de autor y marcas.
Una característica desestabilizadora del Blockchain es que la tecnología facilita las transferencias entre iguales (“peer-to-peer”) o transacciones sin intermediarios como un banco o un órgano de administración. A diferencia del modelo de transacción actual basado en un intermediario, la tecnología del Blockchain requiere una validación a través del consenso entre los mineros. Normalmente, esto se conoce como protocolo de consenso de prueba de trabajo. Los mineros deben aplicar una importante capacidad informática para validar y sincronizar criptográficamente la base de datos en tiempo real y, a cambio, ganan comisiones o “tokens” del Blockchain subyacente.
¿Cómo de revolucionario puede ser el Blockchain para la industria?
Ante el crecimiento explosivo del comercio electrónico, la banca online y la proliferación de transacciones a través del móvil a nivel mundial, las empresas necesitan redes para procesar las transacciones que sean rápidas, seguras, transparentes y eficaces. A pesar del progreso en la tecnología, en las bases de datos y redes tradicionales las funciones de auditoría y registro siguen siendo costosas, ineficaces y vulnerables a los fallos de seguridad.
Las transacciones en el comercio tradicional cada vez son más caras y tienen una complejidad mayor. Las comisiones de cada nuevo intermediario por sus servicios y la transacción ocasionan mayores gastos de gestión. Por ejemplo, en el sector de los seguros, hay gastos de gestión asociados a la suscripción de pólizas, así como costes relacionados con la adjudicación de siniestros. Las capas de costes de estas funciones podrían reducirse o eliminarse mediante un contrato inteligente basado en el Blockchain.
Las ineficacias en el entorno comercial actual a menudo surgen debido a la duplicación. Por ejemplo, en la documentación de préstamos o la negociación de renta fija, múltiples partes hacen un seguimiento de la documentación, la propiedad y la negociación. Este tipo de trabajo duplicado podría reducirse con una solución de Blockchain que requiera de forma inherente que todas las versiones de la base de datos se sincronicen.
La centralización de las bases de datos tradicionales tiene más riesgos de manera intrínseca que un libro de contabilidad compartido. Con un sistema de control centralizado, un solo punto débil (si se viera amenazado) podría poner en riesgo a toda la red comercial. Por lo tanto, el Blockchain descentralizado puede aumentar la seguridad de las transacciones y la contabilidad de manera significativa.
¿Qué futuro tiene el Blockchain?
Aunque históricamente las aplicaciones del Blockchain se han limitado a las criptomonedas (en un principio, utilizadas principalmente para realizar pagos de webs oscuras (“dark webs”) delictivas), la tecnología del Blockchain en sí revolucionará los pagos y la contabilidad de activos legítimos.
Al igual que Internet, sse prevé que transformará los sectores que se han beneficiado de la falta de transparencia en el comercio. El Blockchain tiene el potencial para reducir los costes de transacciones y contabilidad, mejorar la seguridad, y aumentar la eficiencia y eficacia de las transacciones comerciales y personales. Al mismo tiempo, una consecuencia del éxito del Blockchain será la desintermediación de aquellos intermediarios que actualmente se basan en las ineficacias como parte de su modelo de negocio.
Habrá sectores desde el sanitario hasta el de propiedad intelectual que se beneficien, pero los sectores de la banca y la intermediación financiera podrían verse transformados por la implantación de las redes del Blockchain. Aunque esta transformación ofrezca oportunidades para los participantes actuales y los nuevos, esta tecnología supone una amenaza para el statu quo. Los participantes actuales deben estar dispuestos a adaptarse y recibir la nueva tecnología, además de superar los obstáculos derivados del proceso de adaptación.