Private Markets Alpha (PM Alpha), proveedor de soluciones de mercados privados para el sector de la gestión de patrimonios, organizó recientemente un webcast para analizar las perspectivas de los activos privados para este año. Durante este evento, compartieron su visión de mercado Steven McElwain, socio y asesor inmobiliario de Apollo Global Management; Samuel Porat, consejero delegado y director de inversiones alternativas de Neuberger Berman; y Quinn Kuiken, vicepresidente, director para Europa y especialista en deuda privada de Oaktree Capital. Su principal conclusión fue que estamos ante un marco de oportunidades y nuevas tendencias para los mercados privados.
«Hemos identificado tres factores macroeconómicos básicos que, en nuestra opinión, deberían constituir el 65% o más de la exposición de una cartera de mercado privado. En primer lugar, hemos identificado la gran corrección, centrada en las dislocaciones y la revalorización que estamos observando en los activos reales hasta llegar a las estructuras de renta variable o deuda pública. En segundo lugar, el elevado impacto de las presiones inflacionistas, que es un elemento clave de nuestra asignación en el que creemos que podemos ayudar a los inversores en su protección de los ingresos a medio y largo plazo, así como también en reposicionar sus actuales carteras de crédito hacia estrategias más protegidas contra la inflación. En tercer lugar, la brecha de rentas es un factor que ha impulsado las carteras de los inversores en las últimas tres o cuatro temporadas, y es un aspecto con el que podemos aportar valor a los inversores, mediante estrategias especializadas y alternativas de rentas», afirmó Alexis Weber, CEO y fundador de PM Alpha.
En su opinión, las tendencias seculares representan una asignación del 35% (de la exposición de la propia cartera a los mercados privados) para 2023, muy repartida entre dos motores principales. «Por un lado está la tecnología, tanto desde la perspectiva de los consumidores como desde las empresas. Por otro la sanidad, donde hemos observado un cambio y un rápido crecimiento en los pagos de servicios y otros tipos de oportunidades de mercados privados que tienen una aspiración de crecimiento a medio y largo plazo», añadió Weber.
En este sentido, los expertos del sector consideran que es un buen momento para ser prestamista, ya que los mercados muestran una gran volatilidad y el coste del capital ha aumentado de forma generalizada. Los gestores especializados siguen favoreciendo la estructura de capital senior, en instrumentos de tipo variable, donde pueden centrarse en la protección a la baja mediante la creación de nuevos productos de préstamo en activos de alta calidad que pueden generar rendimientos similares a los de la renta variable.
Además, identifica que hay grandes oportunidades en el sector de los activos reales, dadas las recientes modificaciones y la presión del desapalancamiento en Europa. Debido a la estabilidad de los fundamentos, creen que la forma más atractiva de actuar es cubrir las lagunas dejadas por los prestamistas tradicionales (es decir, los bancos) y originar nuevos créditos. En concreto, dentro de los activos reales, algunos ámbitos interesantes son las infraestructuras de internet y los centros de datos. «Existe un elemento de protección frente a la inflación derivado de la indexación, ya que los contratos suelen estar vinculados a la inflación. Además, los gestores especializados pueden incorporar una protección adicional frente a las caídas personalizando las estructuras de los instrumentos de crédito que emplean y evitando las estructuras con pocos pactos», señalaron como conclusión en el webcast.
Por último, destacaron que existen oportunidades para que los gestores de inversiones aumenten el valor de los activos inmobiliarios para generar mejores rentas, ya que los propietarios de activos inmobiliarios individuales no pueden acceder al capital fácil. Además, en EE.UU. hay oportunidad en ingresos alternativos en sanidad y ciencias de la vida derivados de royalties, donde se utilizan ciertas herramientas de estructuración para mitigar los riesgos de inflación. Asimismo, favorecen el sector del consumo en el país, donde se observa una rotación de la demanda, como reacción a la pandemia («ecos de la pandemia»). Se mantiene una elevada demanda de servicios en los sectores de viajes, hostelería y restauración, impulsada aún por un desempleo relativamente bajo en EE.UU. y un exceso de ahorro, que puede cambiar.
En cuanto a la sostenibilidad, un área interesante en la transición energética es la inversión en las empresas que prestan servicios para la revolución de la transición energética (por ejemplo, mano de obra, herramientas de software). Otra área a vigilar es el gran volumen de activos reales que requerirán una próxima transición hacia la eficiencia energética para reducir su huella de carbono en los próximos años.
«Está bien documentado y demostrado que los periodos de recesión producen las mejores cosechas en los mercados privados. En consecuencia, creemos que las estrategias de mercados privados deberían formar parte de todas las carteras de clientes y sugerimos una horquilla de entre el 10 y el 60% de las asignaciones de cartera, en función del apetito por el riesgo y los horizontes temporales de inversión del cliente en cuestión», concluyó Tom Douie, fundador y consejero delegado de PM Alpha.