Los acuerdos con comisiones opacas se han convertido en una fuente de frustración para los inversores en private equity que buscan fondos de real estate.
Y es que, explican los expertos de la consultora inmobiliaria JLL, la industria de gestión de private equity, no tiene actualmente una forma estándar de medir las tarifas y los costos. Y la forma en que se calculan las tarifas varía drásticamente de un fondo a otro, según una variedad de estructuras de tarifas, metodologías y puntos de referencia que difieren según las zonas geográficas.
Es un problema desde hace mucho tiempo, pero últimamente esta frustración ha crecido entre los participantes del mercado, en gran parte porque los inversores en real estate están adoptando más riesgos y abarcando nuevas jurisdicciones en la búsqueda de rentabilidad.
Poca comparabilidad
«La diferencia en las estructuras de las comisiones y la falta de transparencia en las metodologías entre los diferentes gestores puede ser un verdadero dolor de cabeza para los inversores, dificultando la comparación exacta de las ofertas», explica Martijn van Eldik, responsable de Asesoría de Fondos en Asia Pacific en JLL.
Una pequeña diferencia en las comisiones puede marcar la diferencia. «Por ejemplo, en los fondos oportunistas hay una gran diferencia en la forma en que se tarifa el carry –deal-by-deal o fully back-ended–, el preferred return, si es catch-up o no», añade Van Eldik.
Los inversores en general tienen una buena comprensión de los retornos objetivo de los proyectos pero, en la práctica, las diferencias de brutas a netas pueden ser sustanciales debido a cómo y qué tarifas se cobran. «No son solo las comisiones de los gerentes, sino también el resto de costos”.
Una posible solución
“La industria ha tomado nota. Se están preparando planes para poner en marcha medidas coherente a nivel mundial para las comisiones y los costos de los vehículos de inversión inmobiliaria. La propuesta –un índice de gastos totales totales conocido como TGER– tiene como objetivo permitir a los inversores hacer comparaciones más fáciles y precisas entre productos, independientemente del domicilio del vehículo, la estructura y las actividades de gestión, y así ayudar a su toma de decisiones”, explica la consultora inmobiliaria en una entrada en su blog.
En este sentido, el experto de JLL asegura que existe un amplio apoyo de la industria para poner en marcha este enfoque.