El gran interés del inversor internacional, una mayor apertura en la concesión de créditos a las familias españolas y la disminución de la oferta provocarán una subida sostenida de precios en los mercados inmobiliarios de las principales zonas urbanas y costeras en España este año. Esta es la previsión que realiza Century21 España sobre la marcha del mercado inmobiliario para 2017.
Según sus cálculos, durante 2016 el precio medio de la vivienda se situó en los 139.000 euros, lo que supone un 11% más respecto a 2015. En el caso de su red de oficinas, las transacciones alcanzaron un valor medio de 213.000 euros, un crecimiento del 0,5% en comparación con los 212.000 euros de 2015. Las provincias de Barcelona, Madrid y las Islas Canarias concentraron la mayor parte de sus operaciones.
Respecto a la previsión de precios para 2017, Ricardo Sousa, CEO de Century21 para España y Portugal, señala que subirán. “Creemos que factores como el incremento de transacciones en los mercados más periféricos, el rendimiento disponible de los españoles y su poder adquisitivo, condicionarán una subida sostenida de los precios”, explica.
Apetito inmobiliario
El pasado año ha dejado un total de 445.000 transacciones inmobiliarias entre compra-venta y alquiler; lo que sigue siendo una muestra de la recuperación del mercado. Para la enseña, en 2016, el número de transacciones inmobiliarias ascendió a 3.237, de las cuales 2.237 fueron ventas. “Este aumento se debe a la confluencia de diferentes factores entre los que destacan una mayor demanda internacional gracias al atractivo de España, los precios inferiores al resto de mercados así como unos estándares de calidad de vida y seguridad altos; una mayor apertura de la banca en la concesión de créditos hipotecarios y, finalmente una oferta de segundas residencias en zonas costeras con precios muy atractivos”, comenta Sousa.
El País Vasco, Cataluña, las Islas Baleares y la Comunidad de Madrid son las comunidades autónomas en las que resulta más caro invertir en el mercado inmobiliario residencial, mientras que las provincias del interior de Andalucía, Extremadura y Castilla la Mancha son las zonas más baratas para adquirir una vivienda. En cuanto al número de transacciones inmobiliarias Andalucía, Cataluña, la Comunidad Valenciana y la Comunidad de Madrid son las que registran un mayor número, puesto que abarcan todos los segmentos del mercado inmobiliario, despertando un especial interés tanto en el inversor internacional como en las familias españolas.
En opinión de Sousa, “para 2017, se espera llegar a las 500.000 transacciones inmobiliarias, equiparando las cifras de 2008. Con respecto al precio de la vivienda, experimentará un crecimiento sostenido promovido por el aumento de la demanda y la reducción de la oferta. Además, la cultura de la propiedad, fuertemente arraigada en la sociedad española, y la mayor concesión de hipotecas harán que el mercado registre un aumento en la compra-venta en detrimento del alquiler”.
Comprador nacional vs. internacional
Del total de las ventas registradas durante el pasado año, el 18% fueron realizadas por extranjeros, siendo británicos, franceses, alemanes y escandinavos los que más han invertido. Se trata de inversores “interesados en viviendas de lujo situadas en las ciudades de Madrid y Barcelona, así como en zonas costeras de Alicante, Almería, Málaga, Murcia, Islas Baleares e Islas Canarias. Los compradores extranjeros continuarán invirtiendo en vivienda durante 2017 atraídos por la alta rentabilidad de los precios, la oferta socio-cultural y la seguridad de nuestro país”, afirma Sousa.
Respecto a las consecuencias derivadas del Brexit, el CEO de Century21 para España y Portugal comenta que “los británicos tiene una fuerte cultura de invertir en segunda vivienda fuera del Reino Unido, especialmente motivados por el sol y las oportunidades de inversión que ofrece España. Sin embargo, la salida de Reino Unido de la Unión Europea podrá traer consigo cambios que afectarán a su poder adquisitivo y que pueden hacer variar el perfil así como las opciones de estos clientes”.
En cambio, en el caso del comprador nacional, han sido las clases más altas las que primero han retomado su interés en el mercado inmobiliario residencial, percibiéndolo como un valor seguro frente a la inestabilidad de los mercados bursátiles. Según la experiencia de Century 21 España, lo que más demanda este perfil son viviendas de lujo dotadas de todo tipo de servicios, situadas en barrios residenciales bien comunicados y con posibilidades de obtener plusvalías.
Por último, la firma considera que el interés de las clases medias por la vivienda se ha reactivado, superando el número de transacciones inmobiliarias del primer grupo aunque con un valor medio inferior. Éstos se inclinan por pisos de 90 metros cuadrados y tres habitaciones en zonas periféricas de las grandes urbes.