La inversión alternativa despega en todo el mundo: se espera que los activos alternativos globales alcancen los 24,5 billones de dólares en 2028, frente a los 16,3 billones que se estimaban a finales de 2023. España no se escapa de esta tendencia y, para cubrir la demanda por soluciones descorrelacionadas con los mercados tradicionales, varias gestoras han iniciado su andadura en poco más de un año. Tienen planes ambiciosos y diseñan para el cliente trajes a medida con sus propuestas.
La inversión en activos alternativos no es nueva, pero en los últimos tiempos ha cobrado interés y, por ello, un buen número de firmas especializadas han salido al mercado. Hace un año, Banco Santander anunciaba la puesta en marcha de Santander Alternative Investment (SAI); poco antes, atl Capital lanzaba su división de alternativos en enero de 2023 y Crescenta daba el pistoletazo de salida a mediados del año pasado. Otras entidades que también han lanzado servicios o ampliado su negocio son CaixaBank AM, Diaphanum e Ibercaja Gestión. Y recientemente, firmas más modestas como Terrano Capital, Successful Capital SGEIC -liderada por Fran Piera-, Arraigo V&P y Southway Capital Partners daban sus primeros pasos en segmentos muy especializados de la inversión alternativa, como el inmobiliario o el capital riesgo, por poner solo algunos ejemplos (ver apoyo).
No en vano, es un mercado en crecimiento en todo el mundo. Según Preqin, se espera que los activos alternativos globales alcancen los 24,5 billones de dólares en 2028, frente a los 16,3 billones que se estimaban a finales de 2023. Esto representa una tasa de crecimiento anualizada prevista del 8,4% desde 2022 a 2028, frente al 12,3% registrado en el periodo de 2016 a 2022.
Luis García Izquierdo, CEO de Santander Alternative Investment (SAI), refrenda que existe apetito por los activos alternativos en España, “independientemente de si hablamos de inversor minorista o institucional”. El experto cree que esa va a seguir siendo la tendencia en los próximos años, “porque todavía estamos por detrás de los inversores europeos en cuanto a asignación de activos alternativos en nuestros portafolios y muy lejos de Norteamérica”.
Además, el directivo considera que las condiciones para este crecimiento se van a seguir dando, “ya que el inversor, al acceder a las inversiones alternativas, busca tanto el mayor retorno por la prima de liquidez y la complejidad como poder descorrelacionar en parte su cartera y reducir la volatilidad de la misma, algo que no se está pudiendo hacer a través de los activos tradicionales”.
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