El evidente crecimiento del eBanking, la tecnología financiera y los sistemas de pago alternativos es sumamente relevante para promover un modelo financiero sostenible. En el mundo fintech, España ocupa la séptima posición a nivel europeo, según el informe de Ernst & Young (EY). Así pues, se evidencia la proactividad del sector financiero español para lograr un impacto tecnológico, económico, social y medioambiental en una sociedad cada vez más digitalizada.
La digitalización de las empresas se ha convertido en el gran motor de cambio. La publicación Comunicando el Progreso 2021 sostiene que en España la financiación sostenible incrementó un 45% entre 2020 y 2021; y prevé que para 2025, la banca digital llegue a alcanzar los 22.300 millones de dólares. La escuela de negocios TBS Education en su reciente informe sobre la situación española en el ámbito del comportamiento del consumidor en la digitalización bancaria (eBanking), muestra que el incremento anual en España de búsquedas de aplicaciones móviles (apps) financieras en 2019 aumentó un 9% respecto 2018 y luego en 2020 incrementó un 56%. En total, las búsquedas han aumentado un 70% en dos años, respecto a los datos de 2018.
Además, la financiación electrónica actual puede verse aplicada en multitud de áreas económicas y laborales, causando así un cambio de paradigma. La Asociación Española de Fintech e Insurtech (AEFI) confía en que la transformación digital de la banca generará alrededor de 5.000 empleos. Sin embargo, el auge de este modelo de negocio es dispar en el territorio español, según el estudio realizado por TBS Education.
Beneficios para al consumidor de los nuevos sistemas de pago alternativos
PayPal ya es, según declaraciones de la empresa, el segundo método de pago más utilizado en España, después de las tarjetas de crédito. Esta plataforma de pago, seguida de otras como Bizum, Google Pay o Apple Pay, ha tenido una gran penetración en el sector comercial, permitiendo el acceso a servicios de una forma más rápida y práctica, y al alcance de todo el mundo. En esta misma línea, TBS Education comparte los principales beneficios que han desarrollado los sistemas de pago alternativos en auge:
Los sistemas de pago electrónicos ofrecen principalmente comodidad. Evita las filas del banco para las gestiones financieras o para sacar efectivo. Dispone, en muchas ocasiones, de un gestor personal online, y el acceso a la mayoría de los servicios queda al alcance de un clic. También se pueden vincular las cuentas o automatizar los pagos.
Los mecanismos de seguridad propios de las apps financieras son más seguros que las tarjetas de crédito. Las acciones de pago se realizan normalmente a través de datos como el número de teléfono o el correo electrónico, que permiten no dar ningún dato relacionado con la cuenta bancaria. Además, los pagos en línea tienen mecanismos de seguridad que cifran todos los datos de las operaciones y piden confirmación directa con el banco.
Como el sistema de pagos online está aún acabándose de incorporar al mercado, actualmente ofrece muchas ventajas económicas para el consumidor. Las operaciones online ya son una realidad para 8 de cada 10 personas, según un estudio que realizó Mastercard en 2020. Sin embargo, este es un mercado que aún se abre paso entre los métodos de pago tradicionales, este ofrece ventajas económicas como descuentos, operaciones sin intereses, facilidad de contrataciones o pagos sin comisiones.
Los trámites de pago son más rápidos al tener comunicación directa con la banca online. Las gestiones que se pueden realizar al instante son las que más éxito tienen, y en el caso de las operaciones en línea, estas han acelerado los procesos de compra, gestión y pagos en general, siempre con una validación por parte del cliente.
Los nuevos métodos de pago nos facilitan el acceso internacional de los servicios y de los medios de liquidación. Actualmente, las nuevas formas de comunicación han permitido a las app’s de pago ir un paso más allá, y poder integrar las diferentes actividades diarias en cualquier momento y lugar: pedir comida a domicilio, poner gasolina, pagar parking o pagar a través de lugares alternativos en comercios que no disponen de TPV’s.
“Con todo esto, el uso y consumo de servicios de banca digital seguirá creciendo en penetración en la población y en la convivencia entre la banca y las fintech. Los servicios bancarios y financieros continuarán el proceso de innovación e integración de los nuevos métodos de pago”, añade el Dr. Edgar Sánchez, profesor colaborador de TBS Education en Barcelona y director del estudio.