Credit Suisse Capital Services publicó, recientemente, su encuesta semestral sobre el sentimiento inversor en hedge funds, realizada entre 275 inversores institucionales a nivel global, que representan 1,04 billones de dólares invertidos en hedge funds. Los participantes fueron encuestados acerca de varios temas, incluyendo las principales tendencias de la industria y las predicciones, así como sobre sus preferencias y planes en su asignación de activos para el segundo semestre del año.
Entre los principales puntos a destacar de la encuesta, cabe destacar que el apetito por la inversión en hedge funds continúa fuerte, habiendo sido testigos del mayor giro en positivo de la demanda neta entre las diferentes clases de activo que fueron encuestadas por Credit Suisse, y se encuentra a la par con la inversión en private equity como la clase de estrategia de inversión más atractiva a la hora de asignar activos en el segundo semestre del año. Esto representa un importante cambio con respecto a los últimos años, parece que los inversores estuvieran dispuestos a volver a apostar por los hedge funds, en términos de sentimiento positivo e interés.
Continuando con un momentum o impulso positivo, el 93% de los inversores esperan incrementar o mantener su exposición en hedge funds en el segundo semestre del año. Además, el entusiasmo por los hedge funds se ha visto influenciado por una confluencia de factores: un rendimiento superior, el entorno del mercado, unas estructuras de comisiones más alineadas y el extendido uso de soluciones hechas a medida y vehículos no tradicionales.
Conforme se avanza hacia un periodo que es más proclive a la inversión activa, con una mayor volatilidad, una menor correlación y una mayor dispersión en los mercados, merece la pena señalar que la demanda por las estrategias de gestión pasiva con enfoque únicamente en posiciones en largo ha disminuido, y que se espera que alcance el terreno negativo en la segunda mitad del año.
“Los inversores continúan teniendo un creciente apetito por los hedge funds gracias a una variedad de factores, incluyendo unas comisiones y términos más alineados, así como un uso personalizado de soluciones y vehículos no tradicionales, especialmente en cuentas gestionadas y de co-inversión”, comenta Joseph Gasparro, quien lidera el departamento de asesoramiento estratégico y de contenido de Credit Suisse Capital Services.
El interés por las diferentes estrategias
La inversión en estrategias macro discrecionales es la principal preferencia para el segundo semestre de 2018. A finales de 2017, ya se vio un giro positivo de la demanda, del 13%, hacia la inversión en estrategias macro discrecionales, pues los inversores prefieren una menor correlación con los activos de riesgo. Tras años de mercados prosaicos, la volatilidad ha regresado, proporcionando un entorno fértil para este tipo de estrategia.
La renta variable se sigue viendo favorecida, el principal catalizador de esta preferencia son los fuertes resultados empresariales, el regreso de la volatilidad, una menor correlación y un incremento de la dispersión. En contraste con el año anterior, existe una mayor divergencia en la demanda entre distintas sub-estrategias dentro de la renta variable: el interés por la renta variable emergente ha disminuido considerablemente con respecto a 2017, el sentimiento por esta clase de activo se ha visto afectado por la fortaleza del dólar y el incremento de las tensiones comerciales.
En comparación con el año anterior, la dispersión de las economías de los mercados emergentes y el rendimiento de los hedge funds será probablemente mucho más pronunciado. Aunque siempre es crucial, el entorno actual señala la importancia de la selección de gestores a la hora de determinar los rendimientos.
Por primera vez, las estrategias con factores medioambientales, sociales y de gobierno corporativo, las llamadas ESG, aparecen en los diez primeros puestos de preferencia de inversión para el segundo semestre del año. Además, continúa generando interés, un 25% de los inversores tienen estrategias ESG en sus asignaciones.
“Hemos visto un aumento considerable de la demanda por estrategias macro discrecionales entre los inversores encuestados, conforme la volatilidad ha regresado a los mercados. Al igual que hemos visto hasta ahora, para el resto de 2018, esperamos que la renta variable continúe en lo más alto de las asignaciones de los inversores. También es notable la inclusión de factores ESG como una de las principales preferencias”, comentó Jaynita Sohi, co-responsable de la división estadounidense de Credit Suisse Capital Services.