Con el objetivo de aprovechar las restricciones del financiamiento para los gestores inmobiliarios en EE.UU., Credicorp Capital Asset Management y la gestora especializada en activos inmobiliarios Independencia se prepara para cerrar el libro de suscripciones de su nuevo fondo de deuda privada.
La estrategia, llamada Deuda US 1, invertirá en créditos de corto plazo a los actores del rubro, los que serán respaldados por activos inmobiliarios de todos los sectores, según detalla a Funds Society la asociada senior de Inversiones Inmobiliarias de Credicorp Capital, María Verónica Allende.
El vehículo aspira a un tamaño entre 15 millones y 20 millones de dólares. Está siendo distribuido en Chile –donde lo están ofreciendo particularmente a inversionistas de banca privada–, Perú y Colombia, con un ticket mínimo de 50.000 dólares.
Actualmente, están en proceso de roadshow con el fondo, pero Allende destaca que esperan tener las órdenes cerradas a mediados de agosto de este año.
Este lanzamiento se enmarca en un contexto de alto interés en las inversiones alternativas. Desde Credicorp, la ejecutiva señala que estaban sondeando oportunidades de inversión directa en el extranjero “desde hace tiempo” y que este fondo marca su entrada al mercado estadounidense, diversifica su oferta de alternativos y refuerza el pilar de deuda privada.
La estrategia
La tesis de inversión del fondo Deuda US 1 es aprovechar la coyuntura actual de las condiciones de financiamiento, que ha restringido el acceso a la banca a los gestores inmobiliarios estadounidenses. Esto, comenta Allende, abre un espacio para que nuevos actores entren al negocio de la deuda privada.
“Las restricciones en colocaciones bancarias generan espacio para financiamientos privados incluso a mayores tasas que las bancarias, permitiendo obtener retornos más altos”, explica la ejecutiva.
Antes, los bancos financiaban los proyectos inmobiliarios hasta un 75% del valor del activo. El resto quedaba en manos de los socios. Hoy, en cambio, los préstamos cubren entre un 50% y un 60% de ese valor y además tienen restricciones de capital. Por lo tanto, explica Allende, “la deuda subordinada llena el espacio necesario para poder desarrollar un proyecto”.
Los créditos serán analizados y aprobados por los comités de inversiones de Credicorp Capital e Independencia, que tienen más de 15 años de experiencia en el mercado inmobiliario estadounidense, agrega.