La gestora estadounidense Blackstone se ha quedado finalmente con el ‘Proyecto Tourmalet’, una de las carteras inmobiliarias de CaixaBank y que estaba valorada en unos 1.000 millones de euros, según publica Idealista. El paquete está compuesto por préstamos garantizados con 271 promociones de obra nueva terminada, 160 suelos y promociones de obra nueva en desarrollo.
Según informa el portal, Blackstone se ha impuesto a entidades como Goldman Sachs para lograr una cartera con un 23% de las viviendas ubicadas en la Comunidad de Madrid y el resto en Sevilla, Málaga y Cataluña.
Más allá de las viviendas, el suelo es residencial, y de diferentes tamaños: algunos de ellos se encuentran en zonas atractivas de comunidades autónomas como Madrid (por ejemplo, en Aravaca, Valdemarín, Tres Cantos o Valdebebas).
La historia compradora de Blackstone en España no es nueva: Idealista destaca la adquisición de viviendas protegidas a la Empresa Municipal de la Vivienda (EMV) en octubre de 2013 y que están ubicadas en los distritos de Carabanchel, Vallecas y Villaverde –ahora estos inmuebles forman parte de la socimi creada por el fondo, Fidere Patrimonio, que debutó en bolsa el 29 de junio-. También compró una cartera hipotecaria a CatalunyaCaixa por 4.122 millones de euros, y otra de promociones residenciales y suelo a Sareb, por 250 millones (el proyecto Aneto).