BlackRock y Santander han suscrito un acuerdo para la financiación de una cartera diversificada de 600 millones de dólares en infraestructuras a través de fondos de crédito privado. Según explican, se centrarán en los sectores de comunicaciones, energía, energía y transporte. Esta transacción estructurada será financiada por fondos y cuentas administrados por BlackRock.
Según destacan, la franquicia de deuda privada de BlackRock proporciona soluciones de financiación «diferenciadas, flexibles y escalables» a una amplia red de instituciones financieras y corporativas globales. A través de la amplitud de los más de 50.000 millones de dólares de patrimonio neto de clientes de infraestructuras de BlackRock en renta variable, deuda y soluciones, la firma ha construido una de las franquicias de deuda de infraestructuras líderes del mercado, abasteciendo, estructurando y gestionando activos de clientes con potencial de generación de ingresos.
«Nuestra franquicia de deuda de infraestructuras busca operaciones de financiación ventajosas para todos que resuelvan las necesidades de las instituciones financieras y las empresas, al tiempo que generan rendimientos para los inversores a largo plazo. Tenemos una larga relación con Santander y esperamos proporcionar capital flexible para apoyar el crecimiento de su franquicia global de financiación de proyectos y todos los sectores de la floreciente economía de infraestructuras», ha explicado Gary Shedlin, vicepresidente de BlackRock.
Por su parte, José García Cantera, director financiero del Grupo Banco Santander, ha añadido: «Nos complace anunciar esta transacción, que subraya nuestro compromiso con la movilización de deuda privada. Mediante la rotación proactiva de nuestros activos, no sólo reforzamos nuestra posición financiera, sino que también generamos capital para un crecimiento rentable adicional. Este enfoque es fundamental para nuestra estrategia de crecimiento sostenible y creación de valor para nuestros grupos de interés».