Vivimos en un mundo cambiante. Cada día surgen nuevas tecnologías o nuevas aplicaciones y versiones de tecnologías ya existentes. Y las criptodivisas son un asunto de máxima actualidad que se encuentra en evolución y desarrollo.
Según un artículo publicado por Cripto 247, uno de los temas más controvertidos sobre la minería del bitcoin y otras criptomonedas es el consumo de energía. La web recoge un artículo publicado por el medio inglés Independent, según el cual para fin de año el bitcoin habrá utilizado el 0,5% de la energía global.
Sin embargo, la experta e investigadora estadounidense con un postdoctorado en ingeniería eléctrica e informática Katarina M. Kelly-Pitou precisó que los bancos consumen hasta tres veces más energía que el bitcoin.
Para la ingeniera, que trabaja como investigadora asociada en la universidad de Pittsburgh, el tema ha sido simplificado en exceso y muchas veces se lo encara de manera errónea. En su opinión, las nuevas tecnologías, como en algún momento lo fueron los coches, los aviones y las computadoras, suelen utilizar energía de manera intensa al principio, pero a medida que avanzaba la innovación, esa cantidad disminuye de manera que es posible ahorrar energía.
«Creo que muchos no logran entender uno de los beneficios más básicos de los sistemas de energía renovable. La producción de electricidad puede aumentar sin dejar de tener un impacto mínimo en el medio ambiente. En lugar de centrarse en la cantidad de energía que utiliza bitcoin, la discusión debe centrarse en quién realmente la está produciendo y de dónde proviene su poder», explicó Kelly-Pitou a Toshi Times.
La experta no niega el hecho de que la minería de bitcoin consume mucha energía y que durante el año pasado el consumo de energía por la minería de esta criptomoneda se estimó en 30 teravatios por hora, que es la misma cantidad de energía que necesita Irlanda durante un año.
Por otra parte explica que la cantidad de energía no es exorbitante. Los bancos utilizan aproximadamente 100 teravatios anuales de energía. Si la tecnología avanza, especialmente en el bitcoin que es una tecnología incipiente, los costos de funcionamiento de la red podrían disminuir significativamente.
“En lugar de discutir el consumo de energía del bitcoin en general, las personas deberían discutir la producción de carbono de bitcoin y comprender si ciertas ciudades mineras están agregando una carga ambiental. Aunque ha habido una amplia discusión en los medios sobre el consumo de energía del bitcoin, no conozco ningún estudio que calcule la huella de carbono comparativa del proceso del bitcoin”, indicó.
En el mundo, el consumo de energía está subiendo y la Administración de Información de Energía de Estados Unidos anticipa que aumentará en casi un 29% en los próximos 20 años. Sin embargo, según la investigadora, el aumento de energía solo es malo sino se cambia a una producción de energía con menos carbono, según el artículo de Cripto 247.