Desde el pasado 25 de noviembre ha empezado a cotizar oficialmente el fondo de inversión no rescatable Banchile Oro, según ha comunicado la Bolsa de Santiago con motivo de su registro el pasado jueves 21 de noviembre.
El objetivo del fondo es «ofrecer una alternativa de inversión que aporta diversificación al portafolio de nuestros inversionistas en un fondo cuya estrategia de inversión busca mantener su patrimonio altamente expuesto al precio del oro», afirma Sergio Rivero Campos, gerente de estrategias balancedas e inversiones alternativas de Banchile Inversiones.
Rivero, en declaraciones exclusivas a Funds Society, explica en detalle cómo surgió la oportunidad de lanzar este producto que empleará la misma estrategia de inversión que usa la familia de fondos MarketPlus, fondos trackers que iniciaron su operación en el año 2016 y poseen un track record probado en la industria.
«Teníamos interés en lanzar un fondo de commodities dentro de esta familia, aunque replicar los índices con futuros era complejo. Al anunciarse durante el Chile Day de 2019 una serie de medidas para flexibilizar el régimen de inversión de los fondos de pensiones que incluía la inversión en oro, ahí vimos la oportunidad», declara Rivero.
El producto irá dirigido a clientes retail a través de los Fondos Mutuos Portafolio Activo además de clientes de banca privada y family offices: «Nuestra intención es mostrar desde un primer momento un buen track record con el Oro y luego ofrecerlo a grandes clientes institucionales«, afirma Rivero, que explica que en un primer momento no se solicitará autorización a la CCR (Comisión Clasificadora de Riesgo).
En concreto, el fondo invertirá al menos el 70% de su activo “en instrumentos, valores o contratos ligados al oro”. Además, el reglamento añade que, en caso de que la exposición al oro se haga a través de derivados, el fondo podrá llegar a mantener el 100% en “en instrumentos de deuda u otros instrumentos cuyo subyacente sean títulos de deuda, tales como cuotas de fondos o títulos representativos de índices de deuda”.
Con respecto a la política de derivados, el fondo podrá invertir en este tipo de instrumentos tanto como cobertura de riesgos como de inversión, no pudiendo superar los recursos del fondo comprometido en márgenes el 20% del patrimonio del mismo. El reglamento añade que los activos objeto de los contratos de derivados serán principalmente oro, sin perjuicio de que también podrán celebrarse contratos sobre otro tipo de activos tales como tasas de Interés, instrumentos de deuda, monedas, fondos de inversión, commodities o índices.
«El objetivo del fondo es conseguir 100% de exposición al precio del oro a través futuros, y el resto del capital invertirlo de tal manera que se obtengan una rentabilidad suficiente para cubrir el coste de la estrategia», añade Rivero.
El fondo esta disponible en dos series: serie A, para por montos iguales o superiores a 150.000.000 millones de pesos (187.500 dólares) con un gasto del 0,7% anual y la serie BCH reservada a fondos de la propia administradora. Las cuotas están denominadas en pesos chilenos y se pueden acoger a beneficio tributario siempre y cuando cumplan con los requisitos de presencia bursátil.
En línea con lo anunciado durante el Chile Day 2019 celebrado en Londres, el pasado mes de octubre la superintendencia de Pensiones puso en consulta una nueva una norma que flexibiliza el régimen de inversión de los fondos de pensiones y de cesantía, entre cuyas medidas se incluye la inversión en instrumentos con exposición a oro.
De esta forma, el regulador reconoce el carácter refugio que tienen esos activos en períodos de incertidumbre económica y los beneficios que aportan en la diversificación de las carteras. La nueva norma aún no ha sido publicada.