Altamar Capital Partners, grupo español independiente de inversión alternativa global, ha ampliado su plataforma de gestión de activos alternativos con la creación de una nueva área de negocio, Altamar Credit, enfocada a la gestión de fondos de deuda privada. Esta nueva filial del grupo estará codirigida por Rodrigo Echenique Sanjurjo y José María Fernández Rodríguez.
Rodrigo Echenique Sanjurjo ha sido durante los últimos cuatro años Managing Director de Santander Bank, N.A, la filial norteamericana del Banco Santander, en el que antes fue director ejecutivo de Financiaciones Estructuradas en la división de Global Banking & Markets. Durante su última etapa en el banco fue responsable del equipo de Leveraged Finance en Estados Unidos con foco, principalmente, en la originación y ejecución de operaciones apalancadas con fondos de Private Equity, fondos de deuda privada e inversores institucionales.
José María Fernández Rodríguez ha sido director general del Tesoro Público, dependiente del Ministerio de Economía, Industria y Competitividad, durante los últimos dos años y medio y miembro del consejo de directores del Banco Europeo de Inversiones en Luxemburgo. Previamente, entre los años 2010 y 2013 fue investigador del Laboratorio de Ingeniería Financiera del Massachusetts Institute of Technology en Boston y consultor de Mercados de Valores, Desarrollo Financiero y del Sector Privado en el World Bank.
En 2016 la firma ha puesto en marcha la nueva oficina del Grupo en Nueva York dirigida por Harvey Lambert. Ello supone un paso más del grupo en el mercado de secundarios que coincide en el tiempo con el lanzamiento de su nuevo fondo Altamar Global Secondaries IX que acaba de realizar a principios de este mes de diciembre su primer cierre en 300 millones de euros, con un tamaño objetivo del fondo de 500 millones de euros.
El grupo Altamar Capital Partners ha cerrado el año 2016 con unos extraordinarios resultados y algo más de 1.000 millones de euros en nuevos activos bajo gestión captados entre inversores globales. Con todo ello, el patrimonio históricamente comprometido para la gestión a Altamar roza los 4.000 millones de euros.