La crisis de la COVID-19 ha dejado entrever el papel fundamental que puede desempeñar el direct lending en la recuperación económica, trabajando a la par con entidades bancarias para aportar liquidez a muchas empresas del mercado español. Hace unas semanas Carmen Alonso, directora ejecutiva de Tikehau Capital para Iberia y Reino Unido, nos daba las claves del mercado de deuda privada en el contexto actual. En esta ocasión, Ignacio López del Hierro, director de inversión en deuda privada, analiza la evolución del mercado de direct lending español en los últimos meses.
1. ¿Cómo ha evolucionado el mercado español de direct lending durante la crisis del COVID-19?
El mercado de direct lending en España ha crecido de forma constante durante los últimos cinco años, con más operaciones cerradas cada año (34 en 2019 en comparación con las siete cerradas en 2014*), más actores interesados en el mercado y más capacidad para apoyar operaciones de todos los tipos. Es importante recalcar que los equipos directivos y los accionistas de las empresas del mid-market están apreciando el valor que este tipo de financiación puede aportar a sus empresas a largo plazo y a su capacidad para aplicar con éxito su plan estratégico.
Durante el pico de la pandemia en marzo de 2020 y hasta mayo de 2020, en España, esos equipos directivos y accionistas se centraron en gestionar dificultades a corto plazo, que, en la mayoría de los casos, fueron necesidades inmediatas de liquidez. En ese contexto, el análisis de nuevas oportunidades de financiación por parte de los direct lenders se paralizó. Dichas necesidades fueron resueltas en su mayoría mediante el acceso a préstamos garantizados por el gobierno y canalizados por los bancos españoles.
No obstante, a medida que España salía del confinamiento y durante los meses de junio y julio, un mayor número de operaciones salieron al mercado en busca de financiación, principalmente para realizar adquisiciones en aquellos sectores que tuvieron un buen desempeño durante el pico de la crisis.
En este contexto, los direct lenders se están beneficiando de un mayor acceso para financiar aquellas empresas que demostraron su resistencia durante el confinamiento. Esto se debe a que había cierta incertidumbre sobre el apetito y la capacidad de los bancos para financiar nuevas operaciones, teniendo en cuenta la cantidad de liquidez que habían inyectado en el mercado durante los meses de máximo impacto de la pandemia.
A largo plazo, creemos que la situación actual resaltará el papel crucial que pueden desempeñar los direct lenders para la economía real, trabajando junto a bancos, equipos directivos y accionistas para ayudar a satisfacer sus necesidades de financiación y sirviendo de complemento a otros financiadores, como los bancos.
*Según datos de Deloitte Alternative Lender Deal Tracker Spring 2020
2. ¿Cómo están gestionando las empresas que tienen en cartera en este entorno de incertidumbre?
La situación actual no tiene precedentes y, por lo tanto, nuestra postura ha sido la de ser lo más solidarios y flexibles posible para ayudar a las empresas que tenemos en cartera a afrontar las necesidades que han surgido como consecuencia del COVID-19. Es importante trabajar conjuntamente con los equipos directivos y con los accionistas de las empresas y, al mismo tiempo, ser prudentes y rigurosos en el análisis de cada situación particular para garantizar que nuestra posición en la estructura de capital no se vea comprometida.
Algunas empresas de nuestra cartera han tenido un buen desempeño en los últimos meses, con una necesidad limitada de acceder a nuevas líneas de liquidez. Sin embargo, otras han necesitado mejorar su posición de liquidez y, por lo tanto, les permitimos una o varias de las siguientes alternativas en función de sus necesidades:
– Incurrir en financiaciones bancarias adicionales garantizadas por el gobierno: las acomodamos en nuestras estructuras de capital y las reflejamos en la documentación de financiación a largo plazo vigente como deuda adicional permitida
– Capitalizar o diferir los pagos de intereses durante el pico de la pandemia para preservar la liquidez; y/o
– Renunciar al cumplimiento de covenants de apalancamiento cuando ha sido necesario debido a la disminución de la actividad en dichos meses de confinamiento.
En cualquier caso, nuestro principal objetivo ha sido permanecer en comunicación constante con equipos directivos y accionistas durante la crisis para asegurarnos de que estamos bien informados de sus necesidades. De esta manera, podemos reaccionar rápidamente y asegurarnos de que las empresas tienen el apoyo adecuado para hacer frente a esta situación sin precedentes. El hecho de contar con un equipo local y de ser el único prestamista en la mayoría de nuestras inversiones nos permite tomar el control y poder reaccionar de manera ágil, lo cual ha sido fundamental en este contexto.
3. ¿Qué diferencia su proceso de inversión del de sus competidores?
Cuando analizamos una oportunidad, dedicamos tiempo a entender el posicionamiento de la empresa dentro de su sector, su plan de negocio y la trayectoria del equipo directivo y los accionistas. Este trabajo lo realizan nuestros equipos locales y nos posicionamos como un socio financiero local a largo plazo, con alcance y capacidades internacionales. La gestión y el seguimiento de la cartera de cada operación está a cargo del mismo equipo que realizó el análisis de crédito y negoció la transacción.
En el mercado español, hemos construido una red local y desarrollado relaciones a largo plazo que nos posicionan bien para originar oportunidades atractivas de inversión. Nuestras estructuras de financiación también se adaptan al mercado y a las particularidades empresariales y financieras locales. Así, podemos invertir en estructuras de adquisición apropiadas para este mercado y usar legislación española, lo que ha sido muy apreciado por las empresas locales que tenemos en cartera.
Asimismo, Christian Rouquerol, director de ventas de Tikehau Capital, añade lo que considera sus tres factores diferenciadores:
1. “La firma tiene una fuerte alineación de intereses con sus inversores y se beneficia de un fuerte capital social de 2,8 billones de euros (a 30/06/20) que utiliza parcialmente para invertir en sus propios fondos, incluyendo TDLV. Concretamente, ha comprometido más de 250 millones de euros a través de su tercera y cuarta generación de fondos paneuropeos de direct lending. En la quinta generación, la firma comprometerá al menos 90 millones de euros”.
2. “Es uno de los equipos de deuda privada más grandes y mejor establecidos (cerca de tres décadas y 17 años de experiencia media sénior) con capacidades locales y una presencia establecida en los principales mercados europeos, como París, Londres, Bruselas, Ámsterdam, Madrid y Milán. Contamos con profesionales dedicados a la deuda privada en cada una de esas ciudades, teniendo capacidad para originar, analizar inversiones y, lo que es más importante, supervisar las compañías en cartera”.
3. “Y, por último, Tikehau Capital tiene un sólido historial de 10 años en direct lending, con 3.800 millones de euros invertidos en fondos de direct lending, 113 transacciones, 82 prestatarios, 11 países (a junio de 2020) y un 11% de TIR bruta para la estrategia (a diciembre de 2019)”.