Las Administradoras de Fondos de Ahorro para el Retiro (Afores) mantienen una importante concentración de sus inversiones en bonos gubernamentales; de acuerdo con cifras de la Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar), las Afores tienen en administración 6,7 billones de pesos (343.589 millones de dólares), propiedad de los trabajadores mexicanos, y de estos recursos el 50% , es decir 3,3 billones de pesos (169.230 millones de dólares), están invertidos en bonos gubernamentales.
Adicionalmente, el 13,49% de los recursos, equivalente a 915.561 millones de pesos (46.951,84 millones de dólares), los destinan las Afores a financiar deuda de empresas en el mercado mexicano.
En total 4,2 billones de pesos (215.384,61 millones de dólares), son invertidos en deuda pública y empresarial; expresado de otra manera, el 63,5% del ahorro para el retiro de los trabajadores, administrados por las Afores en México, se invierten en bonos del gobierno federal y empresas privadas, el restante 36,5% es canalizado a otras opciones de inversión como fondos de renta variable.
Según la Consar, las 10 Afores que conforman actualmente el ecosistema del ahorro para el retiro en México administran un total de 72 millones de cuentas, que representan una cifra ya mencionada de 6,7 billones de pesos (343.589 millones de dólares).
Analistas del mercado han explicado en diversas ocasiones que la razón principal por la que las Afores concentran sus inversiones en bonos gubernamentales consiste en que se disminuye la exposición al riesgo, las inversiones en bonos del gobierno representan un financiamiento “seguro”, que reduce la incertidumbre para las Afores y los trabajadores.
Las Afores siguen mantienen su perfil conservador en su estrategia de inversión, siempre de acuerdo a la regulación mexicana, que es muy específica respecto a los instrumentos y los porcentajes en que puede invertir cada Afore. Según la legislación vigente, las Afores pueden mantener hasta el 100% de sus inversiones en bonos del gobierno federal; si bien todas las administradoras no tienen el total de los recursos administrados en bonos gubernamentales, sí mantienen al menos la mitad de ellos en esa opción de inversión.
Las inversiones en deuda privada son utilizadas por las Afores como una estrategia para diversificar su cartera y ofrecer a los trabajadores mejores rendimientos, además de proteger en ocasiones de la volatilidad del mercado. Sin embargo, es importante destacar que las inversiones en empresas se realizan únicamente en aquellas que cuentan con una alta calificación crediticia.
En los últimos años esta postura conservadora de las Afores les ha redituado buenos dividendos, y por lo tanto a los trabajadores también; en el año 2023 las administradoras registraron plusvalías por un total de 464,068 millones de pesos (23.798,35 millones de dólares), que les permitió recuperarse de las minusvalías registradas en el año 2022 por un total de 215,477 millones de pesos (11.050,10 millones de dólares), que se generaron por los altos niveles de inflación registrados ese año, así como por el alza de las tasas de interés.