Las tres ventanas de retiros parciales de fondos previsionales que se abrieron en Chile durante la contingencia del COVID-19 dejaron un vacío relevante, no sólo en las carteras administradas por las AFP, sino que en el mercado de capitales local. Y ese vacío, según las estimaciones del gobierno del país andino, dependiendo de cómo evolucione el debate de la reforma al sector, podría tomar más de una década en llenarse.
En una presentación reciente, en un seminario organizado por la gestora Moneda Asset Management, el ministro de Hacienda de Chile, Mario Marcel, destacó las medidas que ha estado llevando a cabo la administración del presidente Gabriel Boric respecto al mercado de capitales.
Entre una serie de iniciativas, el economista destacó que “un factor que va a ser muy importante en la recuperación del mercado de capitales va a ser la forma que tome la reforma de pensiones”.
Según el titular de las finanzas nacional, si es que logran aprobar su propuesta de reforma previsional –que incluye cuatro pilares para el financiamiento de las pensiones–, y a la par aumentar la densidad de las cotizaciones, “vamos a poder recuperar el piso perdido en el mercado de capitales entre 7 y 14 años”.
Este horizonte, asegura el expresidente del Banco Central de Chile, da cuenta de “la magnitud de lo que significó el retiro de los fondos de pensiones”.
Cifras de la Superintendencia de Pensiones muestran que el primer proceso de retiros suma la distribución de 17.103 millones de dólares, mientras que el segundo alcanza los 14.636 millones de dólares y el tercero acumula 13.831 millones. Así, la desinversión total totalizaba 45.570 millones de dólares al cierre de julio.
Pilares de la reforma
La propuesta de reforma previsional contempla cuatro pilares fundamentales: una pensión individual garantizada –llamada Pensión Garantizada Universal, o PGU–, un pilar individual, un componente de seguridad social y un pilar voluntario.
En ese sentido, Marcel señaló que tienen que cumplir ciertas características para que apoyen al mercado de capitales local.
En el caso del pilar individual, que mantendrá la lógica de la capitalización individual, y el pilar voluntario, seguirán funcionando con los mismos mecanismos de capitalización que funcionan actualmente.
En el caso del pilar de seguridad social, el economista señaló que “va a tener reservas que tienen que ser capitalizadas, invertidas en el mercado de capitales”.
Finalmente, destacó la relevancia de que la PGU esté adecuadamente capitalizada, para que “el gobierno no esté usando recursos del mercado de capitales para su financiamiento”.