Ahora que ha pasado un tiempo desde las elecciones que dejaron a la oficialista Claudia Sheinbaum como presidenta electa de México, los inversionistas han tenido tiempo de macerar sus expectativas para su gobierno. Y un punto en particular los tiene atentos, inyectando una mayor volatilidad a los activos locales: las implicaciones de una potencial reforma judicial.
Después de la elección del 2 de junio en la segunda mayor economía de América Latina, hay un antes y un después. Tras la arrasadora victoria del partido gobernante, el peso ha perdido un máximo de 21% frente al dólar, mientras que el principal indicador bursátil acumula una caída superior al 5%.
Los capitales habían reaccionado negativamente y asumieron una actitud de cautela dos semanas después. Sin embargo, la reforma al sistema judicial, que los capitales ven con nerviosismo, se ve como un nuevo riesgo relevante para la economía mexicana en el horizonte.
Este proyecto, presentada el 5 de febrero por el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), pretende cambiar por completo el sistema judicial del país. Entre otras cosas, busca llevar a elección popular a jueces y magistrados, una medida que hace temblar a los mercados en un país con una larga tradición de complicidad entre el poder económico y político.
Entre sus críticos están miembros de la cúpula empresarial, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE), las gigantes financieras CitiBanamex, Morgan Stanley y Bank of America (BofA) y la clasificadora de riesgo Fitch. Estas firmas también miran con atención lo que pase en septiembre, cuando asume la nueva legislatura, que ya tiene la mayoría suficiente para poder hacer los cambios constitucionales que prefieran.
CCE: el poder judicial ya no sería un contrapeso
«La reforma al Poder Judicial podría poner en riesgo su capacidad técnica y su independencia. También nos preocupa la reforma a los órganos reguladores y al INE. A los mercados les ha causado inquietud y es importante que las reformas que se presenten sean para atraer más inversión», manifestó Rolando Vega, miembro del CCE, una de las cúpulas empresariales más importantes de México.
Los líderes de la iniciativa privada han mostrado su apoyo y disposición para trabajar con la próxima presidenta, incluso con la liberación de más de 42.000 millones de dólares de inversiones para este año.
Eso sí, el profesional –que también es presidente del Consejo Mexicano de Negocios (CMN)– recalcó que reformas como la que se propone para el poder judicial tienen que debatirse y negociarse.
CitiBanamex: los mercados están subestimando sus impactos
Los mercados en México han subestimado los cambios que impulsa el oficialismo en el Congreso, en particular la reforma judicial, así como su amplia mayoría para modificar la Constitución, según CitiBanamex. Esto, advirtieron, podría desencadenar una reacción negativa acumulada.
“El mercado no parece haber descontado completamente que sí habrá una mayoría calificada de Morena (Movimiento Regeneración Nacional) y que sí se aprobará la reforma judicial. También parece haber desdeñado el impacto político negativo de ésta y otras reformas, así como subestimado su riesgo económico”, señaló la firma en un análisis.
Con la reconfiguración en las Cámaras, el banco del estadounidense Citigroup observó que se cimienta “una nueva configuración de las reglas del intercambio social, económico y político, un nuevo régimen”, en el que los contrapesos estarán sometidos al presidente y desaparecerán las condiciones de competencia en los comicios.
Además, la firma opinó que esto podría suponer “la cancelación de la democracia liberal, asentada en el Estado de derecho y regida por el cambio electoral periódico de gobiernos mayoritarios y sólidamente contrapesados”.
Respecto de la reforma judicial, CitiBanamex apuntó que se debilitará al Poder Judicial como contrapeso al poder y consideró ineficaz designar a jueces por voto en las urnas y no por méritos, al recordar que solo Bolivia ha implementado un modelo similar.
Morgan Stanley: aumenta el riesgo de México
Previamente, el martes el banco de inversión estadounidense Morgan Stanley había advertido sobre los mismos riesgos, degradando a México en sus recomendaciones de inversión a sus clientes.
«Creemos que reemplazar el sistema judicial debería aumentar el riesgo, las primas de riesgo de México y limitar el gasto de capital. Eso es un problema, ya que la deslocalización está alcanzando cuellos de botella clave”, indicó en un reporte.
Morgan Stanley degradó a “underweight” (infraponderado) la recomendación para México, una escala en donde se estima que su comportamiento será peor a lo estimado.
Fitch: los retos clave para Sheinbaum
Este lunes, la agencia calificadora de riesgo Fitch Ratings también hizo un breve comentario sobre la situación en México.
«El manejo fiscal y las reformas propuestas por el oficialismo en el Congreso serán los retos clave que enfrentará la próxima presidenta Claudia Sheinbuam, quien asumirá el 1 de octubre, para mantener la calificación soberana de México”, indicó la agencia.
BofA: “muy alto riesgo” para el sector corporativo
La reforma judicial representa el mayor riesgo para el sector corporativo en México, según un análisis del banco estadounidense Bank of America, liberado este miércoles.
Según el análisis –titulado “Los próximos 90 días podrían dar forma a la próxima década para México: mantenerse a la defensiva, tiene el potencial de transformar la vida política y social del país”–, la propuesta para cambiar el sistema judicial es la más importante del paquete de reformas propuestas.
“Tiene enormes implicaciones en cómo funciona la democracia en el país», explicó el banco estadounidense, y con ello las inversiones.
BofA advirtió que la reforma judicial, que busca eliminar a los siete mil 293 jueces en funciones en México, así como a los 11 jueces de la Suprema Corte de Justicia de la Nación, podría cambiar radicalmente el sistema de justicia en el país.