El apetito de los inversores europeos por los ETFs está creciendo a medida que la utilidad de estas herramientas en la gestión de carteras gana un mayor reconocimiento, según el número de septiembre de 2022 de The Cerulli Edge-Edición Global. Sin embargo, en sus conclusiones reconoce que “siguen existiendo preocupaciones y barreras”, para un mayor crecimiento.
Los activos en ETFs activos en Europa se han duplicado con creces desde 2018, pasando de 7.400 millones de euros a 16.000 millones de euros a finales de julio de 2022. De este universo, los activos de ETFs activos representan solo el 1,2% del mercado europeo de ETFs, que asciende a 1,3 billones de euros, lo que sugiere una oportunidad de crecimiento.
«Hay indicios de que los inversores europeos están empezando a fijarse más en los ETF activos, ya que pueden ofrecer lo mejor de los mundos pasivo y activo», afirma Fabrizio Zumbo, director de análisis de gestión de activos y patrimonios europeos de Cerulli.
No obstante, a corto plazo, la firma advierte que la incertidumbre de los mercados y el debilitamiento de las condiciones económicas han hecho que los flujos hacia los ETF activos en Europa se ralenticen este año. Además, la guerra en Ucrania y la creciente probabilidad de recesión en la región pueden dejar a las estrategias de ETFs activos en desventaja en términos de acceso a materias primas, activos de riesgo u oportunidades no cotizadas.
«Las estrategias activas de ETFs son particularmente adecuadas para ayudar a los inversores a construir el núcleo estratégico de sus carteras, y algunos de los grandes nombres de la gestión de fondos de inversión han entrado en el espacio europeo en los últimos años en un intento de encontrar una diferenciación más atractiva a sus propuestas de valor”, añade Zumbo.
Según el análisis de Cerulli, los datos de Morningstar muestran que las estrategias de renta fija representan la mayor parte de los activos de los ETFs activos, con un 61% del total de activos gestionados. Mientras que las estrategias de renta variable representan el 27%, y los productos del mercado monetario el 10%.
“Los ETFs activos de renta fija podrían experimentar un mayor crecimiento, sobre todo teniendo en cuenta que las preocupaciones de liquidez durante la pandemia de coronavirus resultaron infundadas, ya que la estructura aguantó bien durante la venta masiva que afectó inicialmente a los mercados”, afirma Zumbo.
Por último, el informe de Cerulli señala que las tendencias actuales en Europa hacia estrategias más sostenibles y una mayor atención a los aspectos ESG también están influyendo significativamente en los flujos. “Los productos con etiqueta ESG se encuentran entre los mayores ETF activos de la región, como el JPM Global Research Enhanced Equity ESG ETF, de 765 millones de euros, y el Ossiam ESG Shiller BarclaysCAPE US Sector ETF, de 864,1 millones de euros”, indican.
Sin embargo, identifican que siguen existiendo algunos retos. “El requisito de los ETFs activos de divulgar la totalidad de la cartera diariamente podría obstaculizar el despliegue de los ETFs activos no transparentes, que informan mensualmente o incluso trimestralmente. Además, los proveedores de ETFs activos tendrán que impulsar sus esfuerzos de educación financiera y lanzar campañas de marketing para mejorar la comprensión de los inversores minoristas de los beneficios de estos productos”, apuntan.
No obstante, Cerulli cree que a medida que los inversores europeos vayan comprendiendo mejor los ETFs activos, la gama de productos se ampliará, lo que contribuirá a impulsar un mayor crecimiento en este ámbito.