¿Es el private equity (PE) la clase de activo más emocional dentro de los mercados financieros? Entre el frenesí de las transacciones de private equity, el último informe del equipo de PE de DWS sobre el papel de las emociones advierte que las empresas e inversores podrían estar desperdiciando miles de millones por “no escuchar sus corazones”.
Elaborado por líderes de la industria y destacados académicos en el mundo de las finanzas emocionales y de comportamiento, el informe es, según la gestora, la primera investigación sobre este tema que se ha publicado con respuestas de alrededor de 100 figuras de alto nivel en el panorama mundial del PE.
Los profesionales de alto nivel de la industria consideran que “necesitan transmitir una sensación de certeza en la toma de decisiones, pero saben que en realidad se enfrentan constantemente a la incertidumbre y a ciertos análisis conflictivos”, destaca el informe. El instinto y la intuición forman parte de una clase de activos a largo plazo, pero muchos sienten que no pueden admitir que este sea el caso.
Asimismo, los inversores de private equity se enfrentan a lo que el informe denomina “un muro de presión para hacer análisis detallados, , pero para una gran mayoría es difícil encontrar tiempo para detenerse y reflexionar. En este sentido, los datos de DWS señalan una cifra “sorprendente para un enfoque de inversión inherentemente a largo plazo”, con el 40% afirmando que estaban «abrumados» por demasiados datos.
Por otro lado, más de la mitad de los participantes senior encuestados señalaron abiertamente que los factores emocionales y el utilizar la intuición eran un tema considerado tabú. No obstante, creen que la mitad de su proceso de toma de decisiones se basa en factores más suaves como la confianza y las relaciones.
“El mundo de los fondos de PE se expone como una montaña rusa de emociones a lo largo del ciclo de vida de una inversión”, subrayan desde DWS. Dada la naturaleza a largo plazo del modelo de negocio, muchos sienten que los factores emocionales pueden apoyar y también dañar las buenas decisiones de inversión.
Además, el informe advierte que la industria debería fomentar la capacidad de debatir los aspectos emocionales dentro del ciclo de vida de la inversión en private equity. “Una amplia mayoría siente que una mayor apertura de los desencadenantes emocionales y la naturaleza humana podrían conducir a decisiones de inversión más equilibradas basadas no sólo en un análisis detallado, sino también en los factores más ‘suaves’ de las relaciones, la confianza y la intuición”, añaden.
Por último, algunos expertos creen que dejan pasar buenas oportunidades porque “no hay suficiente análisis, aunque su experiencia e intuición les llevan a respaldar la decisión”.
El estudio ha sido elaborado a través de una serie de entrevistas en profundidad con profesionales senior y altamente experimentados de la inversión en private equity. Estas entrevistas sirvieron para la realización de una encuesta online que recoge las opiniones de 104 participantes.