Los jóvenes españoles tienen menos conocimientos financieros de los que deberían, ya que uno de cada cuatro adolescentes no llega al nivel mínimo de competencia, con lo que no pueden interpretar o entender una factura, diferenciar entre lo que se quiere y se necesita o decidir sobre el gasto cotidiano.
Esta es una de las principales conclusiones del informe «Educación financiera: ¿Qué debemos saber?» impulsado por la aseguradora MetLife y la Fundación Junior Achievement y elaborado por la Universidad de Murcia.
La edad media a la que comienzan a ahorrar está entre los 6 y 7 años y más del 80% de los estudiantes de Primaria y Secundaria dedica su paga a este fin, la mayoría guarda el dinero en casa, más de la mitad tiene un objetivo a medio-largo plazo y sólo un tercio afirma que anota sus gastos para prever la ausencia de fondos.
En cuanto al conocimiento de que se puede pedir un crédito a una entidad financiera en la que no tengas los ahorros, solo el 30% de los encuestados de Primaria lo sabía, porcentaje que llega al 55% entre los estudiantes de Secundaria y sube al 68% entre los de 18 años.
El primer teléfono móvil llega entre los 8 y 9 años, edad en la que los jóvenes empiezan a realizar recados de forma autónoma o utilizar medios de pago diferentes del efectivo. Por géneros, las niñas presentan un mayor hábito en la comparación de productos, búsqueda de ofertas y control del gasto
Por Fórmate a Fondo