El nivel de educación financiera de los hogares españoles es bajo. Además, la percepción que tienen sobre su grado de conocimientos no coincide con la realidad. Un 20% de los hogares cree que tiene una cultura financiera básica cuando no es así.
Estos datos se extraen de la última encuesta del Observatorio del Ahorro Familiar (OAF), promovido por la Fundación de la Mutualidad de la Abogacía y Fundación IE, que ha realizado un diagnóstico de la previsión financiera de los hogares españoles y el ahorro en el medio y largo plazo.
“El ahorro es una pieza clave en el estado de bienestar, también de cara a la jubilación. El ahorro tiene que estar ahí para complementar las pensiones y como precaución ante imprevistos”, ha señalado Laura Núñez, directora del OAF y profesora de IE University. “Conocer qué variables influyen en el ahorro es necesario para instrumentar políticas de tipo fiscal, laboral o de índole social que potencien el ahorro”, añade.
Para estudiar el grado de conocimiento, se han contemplado dos niveles. Por un lado, conocimientos financieros básicos (tipos de interés, inflación, diversificación…). Por otro, conocimientos sobre activos de inversión. Se ha preguntado por los fondos de inversión, de pensiones, las acciones, los bonos y los seguros de ahorro y valorado el conocimiento de los hogares sobre su rentabilidad, riesgo, liquidez y fiscalidad. De estas cuatro características, cabe resaltar que la de la fiscalidad es la más desconocida. «Menos del 10% de los encuestados identifica bien la fiscalidad en alguno de los vehículos de inversión planteados», explica Núñez.
En general, la encuesta concluye que los conocimientos financieros son muy deficientes, en el grupo de los generales casi la mitad no tiene los básicos y en el de activos financieros la situación es peor, el 80-90% no conoce las características básicas de los instrumentos financieros más generalizados. Además, un quinto de las familias españolas considera que tiene conocimientos económico-financieros básicos a pesar de que no los tiene. Un cuarto cree conocer los activos de inversión sin conocerlos realmente.
¿Influye el grado de conocimiento en el ahorro? El estudio señala que el porcentaje de los hogares españoles que ahorra se duplica cuando éstos cuentan con una educación económica básica. Así, el 80% de los hogares que cuentan con este tipo de educación dedica ingresos al ahorro en contraste con el 40% de los hogares sin esta formación. Esta cifra adquiere relevancia al observar que casi un 90% de las familias españolas no conocen los diferentes vehículos de inversión que tienen para gestionar sus ahorros y un 44% no tienen los conocimientos básicos de tipo económico-financiero.
“El estudio evidencia la incidencia positiva de la capacitación financiera en la tasa de ahorro de los hogares y pone de relieve la importancia de dedicar tiempo y recursos a la educación financiera de los ciudadanos. Es una herramienta indispensable para garantizar su buena salud económica presente y futura”, valora Blanca Narváez, directora general de la Fundación del Observatorio.
Por otro lado, los resultados señalan que el nivel socioeconómico de las familias, aunque influyente, no es totalmente determinante en su actitud ante el ahorro, ya que en todos los niveles existen familias que ahorran y otras que no lo hacen, aunque el segmento de hogares que no ahorra nada es mucho mayor en las clases socioeconómicas bajas (54%) que en las más altas (28%). De igual forma sucede en lo relativo al impacto del ciclo vital en el ahorro de los hogares dado que, según el estudio, en todos los rangos de edad existe, al menos, un 27% de hogares que no ahorra nada, aunque son los más jóvenes (20-24 años) y los mayores de 65 los que menos ahorran (38% y 45% de los hogares, respectivamente).
El impacto de la pandemia en el ahorro
Un 38% de los hogares ha reducido su ahorro durante la pandemia. En cambio, un 16% de hogares han aumentado el ahorro, mientras que un 46% se ha mantenido constante.
Respecto a cómo será su consumo, ahorro, educación y planificación financiera en el futuro, después de la pandemia, entre el 60-70% de los hogares dicen que no prevén cambiar su comportamiento. Unos datos que son “desalentadores”, lamenta Núñez, .
Motivos de ahorro de los hogares en España
El estudio también incluye una investigación sobre las razones que llevan a ahorrar a las familias españolas para discernir las prioridades de los hogares con sus ahorros. Por encima de todos, destaca el motivo precautorio, elegido razón principal por el 40% de los encuestados, sin diferencias entre nivel de ingresos ni rangos de edad.
A nivel global, le siguen el previsional (13%) y el relacionado con las deudas (12%), pero sí sobresalen diferencias en función de las variables anteriormente comentadas. Así, por ejemplo, en los hogares con ahorro inferior al 25% de su renta el motivo previsional es el segundo más importante, mientras que para los que ahorran más del 25% de su renta lo es la adquisición de vivienda.
En relación con los rangos de edad, para los ciudadanos entre 20 y 44 años la vivienda es el segundo motivo de ahorro, y, en la franja de mayores de 65 años, el legado adquiere un protagonismo especial: el 10% de las familias de esta edad señalan este motivo como el principal, una cifra que quintuplica el porcentaje de alguno de los otros segmentos por edades. Destaca Laura Núñez, que “la educación como motivo prioritario de ahorro es elegida por el 16% de las familias con hijos menores de 15 años, cifra que triplica la observada para hogares sin hijos”.