Durante 2020 y 2021 hemos vivido experiencias a las que jamás pensamos que nos íbamos a enfrentar. Volcanes, «filomenas», inundaciones, el coronavirus… Son eventos para los que contamos con muy pocos antecedentes y ante los que nos puede surgir la duda de si nuestro seguro nos protege ante ellos.
Para ayudar a los ciudadanos, el sector asegurador ha creado un portal informativo para explicar a los asegurados quién les protege y cómo solicitar sus indemnizaciones en caso de haber sufrido un daño a causa de un fenómeno de la naturaleza.
El nuevo portal se llama Naturalmente protegidos y en él aparecen detalladas las pautas a seguir ante diez riesgos diferentes. La web detalla cómo actuar en caso de haber tenido algún percance por efecto de la lluvia, de una inundación, a causa del viento, por culpa de una sequía o de una helada, debido a los efectos de la nieve o el granizo, a raíz de un terremoto, un maremoto o una erupción volcánica, así como por un rayo.
El nuevo portal contiene 10 fichas. Todas tienen una estructura idéntica, que organiza la información a través de un sistema de columnas y niveles de módulos o filas. Cada una de estas fichas explica cómo actuar ante los eventos de la naturaleza mencionados más arriba. Es decir, en caso de daños por lluvia, inundación, tempestad, sequía, helada, nieve, granizo, seísmo, erupción volcánica o rayo.
Naturalmente protegidos supone un nuevo paso en la divulgación de la cultura aseguradora y de la prevención. El lanzamiento de este nuevo proyecto se enmarca en la celebración del Día de la educación financiera 2021, organizado por el Plan de Educación Financiera, un programa del Banco de España y la CNMV con el que colabora UNESPA, la asociación empresarial del seguro.
Las aseguradoras no suelen cubrir desastres como el del volcán
Según datos de Copernicus, el desastre natural de La Palma ya ha afectado a 1.154 edificios de la isla, de los cuales 1.046 han quedado destruidos. Estas pérdidas en edificaciones han hecho que muchos ciudadanos se planteen cuáles son los siguientes pasos que deben seguir para poder recibir alguna indemnización por su perjuicio.
Para Arantxa Goenaga, abogada y socia de Círculo Legal Barcelona, el primer paso que se deben hacer cuando ocurre una desgracia como la que ha sucedido “es informar a todas las entidades con las que tengamos un seguro, no sólo el de la casa sino también de Salud o de las tarjetas de crédito, porque a veces tienen protecciones que desconocemos y que nos pueden ayudar”. En los casos en los que se tenga un préstamo hipotecario es importante que se informe a la entidad bancaria del siniestro para que estén al corriente de lo sucedido y pueden ofrecer alternativas.
Las aseguradoras no acostumbran a cubrir desastres naturales como el que ha sucedido en La Palma ya que, como apunta Goenaga, “siempre las excluyen en su clausurado”. A pesar de ello la abogada indica que “sí que está cubierto por el Consorcio de Compensación de Seguros” y que, en algunos casos, “las pólizas de hogar pueden cubrir gastos accesorios como la defensa jurídica, el asesoramiento legal o el alojamiento durante unos días”.
El Consorcio de Compensación de Seguros siempre dará a los afectados que estén asegurados una indemnización por la vivienda destruida. Aunque, como destaca Goenaga, “no será del valor del mercado de la vivienda, siempre suelen ser inferiores”. Aún y ser inferior, la abogada apunta que “los afectados por la catástrofe natural deben estar atentos a las ayudas estatales y europeas porque pueden cubrir esas diferencias”.
El quién es quién del seguro ante un desastre natural
Ante una catástrofe de la naturaleza, aquellas personas que tengan un seguro serán indemnizadas por alguna de estas tres instituciones: su aseguradora, el CCS o Agroseguro. Todo dependerá de cuál era el bien protegido (una persona, una cosa, animales o cosechas) y cuál el origen del daño.
Una aseguradora es una empresa que se encarga de proteger económicamente a personas y objetos frente a los daños que pueden sufrir como consecuencia de riesgos de todo tipo a los que éstos están expuestos. Entre dichos riesgos figuran algunos eventos de carácter climatológico como la lluvia, los rayos, el granizo o los vientos hasta determinada intensidad.
El CCS (Consorcio de Compensación de Seguros) es una empresa pública que depende del Ministerio de Asuntos Económicos y Transformación Digital. Entre sus funciones figura indemnizar los daños ocasionados por los llamados “riesgos extraordinarios”, entre los que figuran varios fenómenos de la naturaleza como las inundaciones, las tempestades o los terremotos. Esta cobertura es posible gracias a un recargo que se aplica sobre prácticamente todas las pólizas de seguro en España.
Por último, Agroseguro gestiona el sistema español de Seguros Agrarios Combinados. Su objetivo es establecer una cobertura que permite al sector agrario hacer frente a los daños sufridos en cosechas y cabañas ganaderas por fenómenos climatológicos (heladas, sequías, inundaciones…). El seguro agrario en España está basado en la intervención conjunta de instituciones públicas y privadas, tiene carácter voluntario, se realiza bajo la fórmula de pool de coaseguro (actualmente 18 aseguradoras forman parte de este) y cuenta con subvenciones estatales al productor para el pago de la prima.