Cuando vives en pareja, decidir cómo llevar las finanzas es cosa de dos y conviene hablarlo desde el principio para evitar malentendidos. Estamos de acuerdo en que hablar de dinero no es muy romántico. Afrontar el tema puede ser delicado, pero si no queremos que nuestra relación acabe en fracaso deberíamos hablar de ello de forma regular.
Ahorrar solo puede resultar más difícil, pero ahorrando juntos, tendréis a alguien que os ayudará a rendir cuentas y es de esperar que vuestros ahorros crezcan más deprisa. Por ello, OVB España, compañía especializada en planificación financiera, propone algunos consejos que nos ayudarán a alcanzar nuestras metas financieras en pareja.
Estableced objetivos comunes. Fijar un objetivo puede ayudarnos a ahorrar dinero más deprisa, ya que tener algo a lo que aspirar motivará nuestro ahorro. Tanto si necesitáis una cantidad determinada para la entrada de una casa, como si sólo queréis unas vacaciones de ensueño, decidid juntos para qué queréis ahorrar.
Tened en cuenta que establecer metas intermedias os ayudará también a mantener el rumbo. Además, se pueden establecer “premios” para cuando se alcancen. Por ejemplo, salir a cenar si conseguís llegar a una cantidad determinada.
Identificad los ingresos y gastos totales. Normalmente, todos sabemos que debemos pagar alquiler, las facturas de servicios, cuotas de créditos o la compra, pero muchas veces no sabemos cuál es la cantidad total que se requiere para cubrir todos estos gastos fijos. Visualizar estas cantidades os permitirá evaluar cuánto de vuestro presupuesto podrá ser destinado a gastos fijos y así definir qué porcentaje podríais ahorrar.
Ahorrad en el lugar adecuado y de manera sencilla. Abrir una cuenta corriente conjunta tiene muchas ventajas, como centralizar todos los gastos comunes o tener ambos acceso a la información de la cuenta para poder controlar los movimientos. Se trata de una forma de ser transparentes en nuestras finanzas y no tener que calcular constantemente cuánto dinero tiene que aportar cada uno o cuanto os debéis el uno al otro.
Muy pocos sueños se pueden realizar sin dinero: el ansiado viaje, el coche, el nuevo mobiliario del salón, pagar anticipadamente la hipoteca, proveer de una buena educación a vuestros hijos, tener una jubilación tranquila. La mayoría de nuestros deseos deben pagarse antes o después. Un ahorro continuado en el tiempo os permitirá renunciar a créditos y préstamos.
Lo ideal es “pagaros primero a vosotros mismos”, es decir, cuando os ingresen la nómina, traspasáis inmediatamente la cantidad de dinero que queráis ahorrar al producto que tengáis contratado, o incluso que creéis una regla por la que todos los días 1, por ejemplo, cada uno de vosotros traspase 50 euros a ese producto de ahorro.
Estableced reglas de uso. Hay ocasiones en las que alguno de los dos se ve tentado a usar el dinero del producto de ahorro. Por supuesto que lo podréis hacer, pero tenéis que tener en cuenta que estos rescates parciales harán que la evolución de vuestro patrimonio sea menor. Para evitarlo, es importante que os pongáis de acuerdo y establezcáis unas reglas claras que queréis aplicar y los objetivos comunes que tenéis.
Revisad si vuestro plan sigue el curso marcado. Si las cosas no van según lo previsto, echad un vistazo a vuestras finanzas. Puede que os déis cuenta de que gastáis más en el supermercado o de que hay una factura que no habíais incluido en vuestro presupuesto inicial. Esto puede ayudaros a entender por qué no estáis ahorrando tanto como os gustaría, y a poner de relieve las áreas en las que podríais hacer cambios.
Y por supuesto, cuando tengáis vuestra planificación financiera a corto, medio y largo plazo, revisadla siempre que tengáis algún cambio importante (nacimiento de un hijo, cambios de carrera profesional, etc.).
Sed creativos a la hora de ahorrar. Pedir la cena a través del delivery de turno os facilita la vida, pero también os hace gastar más. Una manera de divertirse y compenetrarse podría ser cocinar juntos una rica cena, y seguro que os permitirá ahorrar.
Comparad precios y aprovechad las ofertas. Cuando debáis comprar cualquier producto, lo ideal es que comparéis, así podréis adquirirlo más barato. No importa si es poco, con el tiempo seguro que se trata de una cantidad considerable.
Dejaos asesorar. Contar con un buen asesoramiento sin duda os ayudará a conseguir mejores resultados y a incrementar vuestro patrimonio. Los consultores financieros os escucharán y os recomendarán las herramientas más adecuadas para vosotros de forma gratuita y sin compromiso.
Con toda esta información ya estás preparado para darle un sí quiero a ahorrar. Lo que el amor ha unido que no lo separen las finanzas.