¿Sabes en qué se diferencian los fondos de capital privado de los tradicionales? En esta masterclass, Santiago Daniel, CFA, CAIA, y profesional con más de 20 años de experiencia en gestión de carteras, nos lo explica en esta masterclass del programa Aprende y Crece de Crescenta con Fórmate a Fondo.
En primer lugar, según relata el experto, tanto los fondos tradicionales como los de capital privado comparten la característica de ser vehículos de inversión que agrupan a varios inversores y son gestionados por una entidad que busca maximizar sus intereses. No obstante, las principales diferencias radican en dónde se invierte y cómo se gestionan esas inversiones.
En los fondos tradicionales, el capital se invierte en empresas que cotizan en bolsa, las cuales ofrecen mayor transparencia, información y regulación, aunque con menos oportunidades de crecimiento. Por otro lado, los fondos de capital privado invierten en empresas no cotizadas (aquellas que no están en los mercados bursátiles). Aunque parece que este es un sector más reducido, en realidad entre el 80% y el 90% de las empresas son de capital privado. Además, es en las etapas previas a su salida a bolsa donde se suelen generar las mayores revalorizaciones, ya que es cuando más oportunidades se presentan.
¿Por qué son fondos ilíquidos?
A diferencia de los fondos tradicionales, los fondos de capital privado tienen una liquidez más reducida, ya que el objetivo es mantener la inversión por periodos de tiempo superiores a los cinco años.
La iliquidez de los fondos de capital privado proviene de la naturaleza de las empresas en las que invierten, que no están presentes en mercados públicos, lo que impide deshacer una inversión fácilmente. Aunque la falta de liquidez puede parecer una desventaja, también presenta ventajas significativas. Por un lado, los inversores reciben una prima de iliquidez, es decir, al asumir el riesgo de no poder retirar su inversión de inmediato, suelen obtener una rentabilidad mayor. De hecho, cuanto mayor es la iliquidez, mayor es la rentabilidad, algo que ha sido respaldado históricamente.
Otra ventaja importante es que este tipo de fondos promueven una visión a largo plazo. Muchos inversores, especialmente los más pequeños, tienden a mantener dinero disponible para emergencias, aunque a menudo acaban dejando esos fondos en depósitos por largos periodos. Este comportamiento puede resultar en la pérdida de oportunidades de inversión más lucrativas. Al estar diseñados para el largo plazo, los fondos de capital privado permiten reducir el riesgo y mejorar la rentabilidad de manera sostenida.
¿Por qué son fondos cerrados?
A diferencia de los tradicionales, los fondos de capital privado se marcan un volumen de inversión objetivo y, una vez se cumple, no permiten la entrada de nuevos inversores.
Los fondos de capital privado operan en distintas fases. En una primera etapa, se dedican a identificar oportunidades de inversión, un proceso que requiere tiempo y análisis detallado. A diferencia de los fondos tradicionales, que invierten el dinero inmediatamente después de recibirlo, los fondos de capital privado solicitan los recursos a los inversores de forma gradual, a medida que identifiquen oportunidades.
En una segunda fase, se produce el crecimiento tanto de las empresas en las que se ha invertido como del patrimonio del fondo. Finalmente, en la fase de desinversión, una vez que las empresas alcanzan un nivel de madurez adecuado, se venden las participaciones y se devuelven los fondos a los inversores.
Aunque estos fondos son ilíquidos, a partir del sexto o séptimo año, los inversores comienzan a recibir distribuciones (lo invertido más las ganancias generadas).
La importancia de la gestión
La gestión de los fondos de capital privado juega un papel fundamental en el éxito de la inversión. Mientras que en los fondos tradicionales la diferencia entre un fondo de rendimiento medio y uno superior puede ser mínima, en capital privado las diferencias son mucho más marcadas. Un fondo de capital privado gestionado por un buen equipo puede generar entre un 10% y un 12% de rendimiento adicional en comparación con uno promedio, lo que supone una diferencia significativa.
Los gestores que obtienen buenos resultados tienden a repetir su éxito, lo que crea un círculo virtuoso: las empresas de calidad buscan activamente a estos gestores para financiar sus proyectos y recibir asesoramiento, lo que les permite continuar generando excelentes resultados de manera sostenida. Esto resalta la importancia de contar con gestores altamente capacitados en el ámbito del capital privado.
Este contenido es meramente informativo. Se trata de un vídeo de formación financiera que Crescenta pone a su disposición, sin intención de emitir ningún tipo de recomendación personalizada de inversiones.
No se trata en ningún caso de publicidad de ningún tipo de instrumento financiero, ni una recomendación u oferta de compra.