B100, el nuevo modelo de banca digital de Abanca, ha presentado un nuevo producto que supone un método de ahorro automático vinculado al tiempo que el usuario pasa en redes sociales. “Si hasta ahora solo se podía ahorrar caminando o corriendo, ahora nuestros clientes pueden ahorrar simplemente desconectándose de redes sociales un rato cada día”, explicó Jorge Mahía, el director ejecutivo de B100, en la presentación del nuevo servicio de la entidad.
De esta manera, la entidad amplía su catálogo de «Healthy Banking, Off to Save» y estará disponible con la última actualización de su aplicación. Permitirá a los usuarios doblar el importe máximo diario a traspasar a su Cuenta Health, una cuenta extra remunerada al 3,4% TAE diseñada para animar a los usuarios a cumplir ciertos retos saludables.
Con Off to save, B100 avanza en su proyecto de Healthy Banking coincidiendo con su primer aniversario. A cierre de 2024, B100 superó los 230 millones de euros de negocio que se completan con otros indicadores “relevantes”, destacaba el director ejecutivo: “nuestros clientes han recogido más de 1.000 kilos de plástico con la tarjeta Pay to Save, solo por usarla, y han recorrido caminando o corriendo el equivalente a 14 viajes de ida y vuelta a la Luna, lo que nos hace ser muy optimistas”.
Cómo funciona Off to Save
El usuario puede elegir diferentes retos diarios de desconexión, desde el más exigente (conectarte solo 15 minutos al día), hasta el de menos esfuerzo, una hora al día. A menor tiempo en redes, mayor es la cantidad diaria que se puede traspasar a la Cuenta Health, una cuenta que ofrece un extra de remuneración al 3,40% TAE.
“Como en Move to Save, el reto de salud física con el que lanzamos B100 hace un año, nuestra app se conecta ahora el sistema operativo del teléfono solo para leer el tiempo que pasas en redes, de una forma absolutamente respetuosa con la privacidad y que solo utilizamos para saber si el usuario cumple su reto”, explicó Paloma Barreiro, Head of Product de B100.
Las redes sociales que se toman en consideración para este reto de desconexión digital son X/Twitter, Bluesky, Instagram, Facebook, Tik Tok y Snapchat. “Hemos dejado fuera”, continuaba Barreiro, “otras redes de uso más profesional o educativo, pero en ningún caso se trata de demonizar tecnologías que, bien usadas, pueden tener un impacto muy positivo en nuestras vidas”.
Al darse de alta en B100 los clientes contratan tres cuentas sin comisiones: la Cuenta B100, para el día a día y que presta servicios habituales de un banco digital (transferencias, Bizum, tarjetas…) , la Cuenta Save, diseñada para ayudar a los usuarios a ahorrar y que ofrece un 2,70% TAE, y la Cuenta Health, en la que solo pueden ingresar saldo cumpliendo uno de los dos retos saludables. “Así, desde hoy nuestros clientes de B100 pueden hasta duplicar el máximo diario a traspasar a la Cuenta Health, uno de los productos de ahorro más rentables”, añadió Barreiro.
Para acompañar la presentación de este nuevo producto, B100 ha desplegado una campaña que ha llevado a varios influencers de renombre a dejar de publicar por un tiempo en sus redes sociales. Además, la entidad ha puesto en circulación una colección de adaptaciones de memes que pretende llamar la atención sobre un uso que cada vez genera un mayor debate entre expertos.
Resultados del estudio
En la presentación de Off to Save también se dio a conocer una encuesta en colaboración con Pantallas Amigas, una entidad sin ánimo de lucro pionera que trabaja desde 2004 en el campo del bienestar digital. La encuesta sobre el uso de redes sociales “confirma la percepción más extendida: el 77% de los españoles entre 18 y 55 años cree que pasar menos tiempo en estas redes sería beneficioso para ellos”, según afirmó Jorge Flores, fundador y director de Pantallas Amigas, “un dato que entre los más jóvenes se eleva, y esto da mucho que pensar, hasta el 88%”.
El sondeo también desvela que el 77,5% de los españoles cree que pasar menos tiempo en redes sociales sería beneficioso para ellos, un 88% en el tramo de 18 a 25 años. Uno de cada tres jóvenes de entre 18 y 35 años asegura haber tenido algún impacto negativo en su salud mental, principalmente ansiedad y baja autoestima. Este dato baja hasta el 18% en adultos de 45 a 55 años.
Más del 51% de los encuestados consulta sus redes sociales en horas de clase o trabajo. Además, el 51% del segmento más joven (de 18 a 25 años) ha experimentado un impacto negativo en sus estudios o trabajo por estar pendientes del móvil.
El 87% cree que el uso excesivo de estas redes dificulta las relaciones personales presenciales. El 58% ha discutido con alguien por falta de atención provocada por estas redes sociales. Y el 23% de los más jóvenes pasa más de 3 horas al día en redes sociales.