El primer lunes de octubre, desde hace 3 años, se celebra el Día de la Educación Financiera, una jornada del Plan español de Educación Financiera, con la que se incide en la importancia de la planificación, el ahorro y el acceso a la información para la toma de decisiones.
El Banco de España, la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones firmaron en 2008 el primer acuerdo para desarrollar ese Plan de Educación Financiera, dentro de una estrategia para mejorar la cultura de las finanzas de los usuarios de productos y servicios, con el objetivo de que dispongan de todas las herramientas posibles para gestionar su dinero con seguridad y de manera eficiente.
Así, el Banco de España y la CNMV asumieron, con el referente de iniciativas internacionales similares, la responsabilidad de impulsar ese primer proyecto con vocación generalista en España, al que después se sumaron la Secretaría General del Tesoro y Política Financiera o la Dirección General de Seguros y Fondos de Pensiones.
En 2013 renovaron este compromiso con un segundo convenio que llega hasta este año y que mantiene el objetivo del plan: mejorar la cultura financiera de los ciudadanos para que estén en condiciones de operar con su dinero y sus ahorros con confianza y responsabilidad, «tanto para su propio beneficio como para la sostenibilidad del sistema financiero», según el documento conjunto emitido por ambas entidades.
En el Día de la Educación Financiera, además del Banco de España y la CNMV, colaboran instituciones como los ministerios de Economía y de Educación, asociaciones educativas y de consumidores, fundaciones o entidades financieras.
El aumento de la cultura financiera supone beneficios «significativos» tanto para los usuarios actuales de productos y servicios financieros como para los potenciales, con independencia de su edad y nivel de ingresos.
Tomar decisiones con trascendencia económica es cada vez más complejo, debido a cambios sociales, económicos y demográficos como el aumento de la renta per cápita, el crecimiento del nivel de endeudamiento durante los años previos a la crisis, el aumento de la esperanza de vida o la elevada inestabilidad del mercado laboral, a los que se une la existencia de nuevos canales de distribución y el desarrollo de nuevos productos.
Para el Banco de España y la CNMV, además de para las entidades financieras adheridas a los convenios, la reciente crisis económica «ha puesto de manifiesto algunas situaciones que posiblemente se hubieran podido mitigar mediante un mejor conocimiento financiero de los individuos».
La educación financiera favorece una mejor asignación de recursos, reduce los riesgos asociados a episodios de inestabilidad financiera y, por tanto, contribuye al aumento del bienestar social
Por ello, con motivo del Plan de Educación Financiera, se llevan a cabo iniciativas de difusión y trasmisión de conocimientos e información sobre esta materia a la población, en los que se incluye el Día de la Educación Financiera.
También, en ese camino, el Banco de España y la CNMV han creado una web (www.finanzasparatodos.es) en la que cualquiera puede acceder a contenidos básicos de economía y finanzas que aplicar a sus necesidades diarias.
Las entidades y organismos comprometidos con el plan se encargan también de otras actividades o proyectos que persiguen el mismo fin, la colaboración con medios de comunicación o centros docentes. Sus actividades tienen vocación de generalidad e inclusión de todos los productos y servicios financieros y segmentos de la población, sin ignorar las «características y necesidades» de cada uno de ellos.
Se siguen también en las iniciativas que se llevan a cabo, de las que se realizan «evaluaciones continuas» para valorar su eficacia e identificar «áreas de mejora», los principios de cooperación entre ambos agentes supervisores, para evitar «el solapamiento de esfuerzos», y buscar la «eficacia y eficiencia» de las mismas, y continuidad en el tiempo.
Durante el período de duración del segundo convenio, de 2013 a 2017, las principales acciones que se han emprendido se han centrado en la incorporación de la educación financiera en el sistema educativo y en la jubilación y el ámbito de los seguros, objetivos con los que se trabaja ahora para mejorar esa cultura financiera