Las tensiones comerciales y las corrientes populistas siguen dominando el panorama económico global. La amenaza de una política monetaria más restrictiva y la volatilidad que se cierne sobre los mercados presionan aún más a las multinacionales para tener éxito en sus operaciones en el extranjero. La nueva edición del estudio anual sobre calidad de vida de Mercer indica que muchas ciudades de distintos lugares del mundo siguen ofreciendo un entorno atractivo para las empresas y que calidad de vida es uno de los componentes fundamentales en el atractivo de una ciudad para atraer el talento en movilidad internacional.
Viena vuelve a encabezar la clasificación por décimo año consecutivo, seguida de cerca por Zúrich (2). El tercer lugar lo comparten tres ciudades: Auckland, Múnich y Vancouver; esta última lleva diez años ocupando el puesto más alto del ranking en Norteamérica. Singapur (25), Montevideo (78) y Port Louis (83) conservan su estatus de ciudades con mayor calidad de vida en Asia, Sudamérica y África respectivamente. Bagdad, pese a seguir apareciendo en la parte más baja, ha experimentado notables mejoras en materia de seguridad y servicios sanitarios. El nivel de vida de Caracas, sin embargo, ha retrocedido abruptamente a causa de la inestabilidad política y económica que afecta a Venezuela.
“Tener unas sólidas capacidades, aplicables sobre el terreno, es consustancial a las operaciones globales de la mayoría de las empresas multinacionales, y éstas dependen principalmente del bienestar personal y profesional de los individuos destinados a las localidades en cuestión”, comenta Ilya Bonic, socio de Mercer y presidente del área de Career. “Las empresas que deseen crecer en el extranjero deben tener en cuenta muchos factores para elegir la mejor ubicación para sus empleados y oficinas. La clave es poder contar con datos relevantes y fiables, y con análisis estandarizados, esto es decisivo para que las organizaciones sean capaces de adoptar decisiones de importancia crítica, desde dónde ubicar sus oficinas hasta cómo distribuir, alojar y remunerar a su fuerza laboral global”, añade Bonic.
El estudio de Mercer es uno de los más completas en su categoría; se elabora una vez al año con la finalidad de ayudar a empresas multinacionales y otras organizaciones a retribuir equitativamente a sus empleados en asignaciones internacionales. Además de aportar valiosos datos sobre calidad de vida, el informe de Mercer evalúa más de 450 ciudades de todo el mundo. Este ranking incluye 231 de las ciudades analizadas.
En esta edición, Mercer ha elaborado un ranking específico sobre seguridad personal; en él se analiza la estabilidad interna, criminalidad, cumplimiento de la ley, limitaciones a la libertad personal, relaciones con otros países y libertad de prensa en cada una de las ciudades. La seguridad personal es la base sobre la que se sustenta la estabilidad de cualquier ciudad, y, sin ella, ni el negocio, ni el talento pueden prosperar. Este año los puestos más altos del ranking están ocupados por ciudades de Europa Occidental, con Luxemburgo como ciudad más segura del mundo. Tras ésta vienen, compartiendo el segundo lugar, Helsinki y las ciudades suizas de Basilea, Berna y Zúrich. El último puesto del ranking de seguridad personal de 2019, el 231, lo ocupa Damasco, y solo un puesto por encima, en el 230, se encuentra Bangui, ciudad de la República Centroafricana.
«En la seguridad individual influyen muchos factores y está en constante cambio, dado que las circunstancias y condiciones de las distintas ciudades sufren modificaciones año tras año. Tales factores son cruciales para las multinacionales que asignan empleados a otros países, ya que deben tenerlos en cuenta a la hora de determinar si el trabajador estará seguro y la compensación que le corresponde”, explica Juan Vicente Martínez.
Europa
Las ciudades europeas siguen teniendo la calidad de vida más alta del mundo, con Viena (1), Zúrich (2) y Múnich (3) ocupando las primeras posiciones de la clasificación en Europa, y en el resto del mundo. Hasta 13 de los 20 primeros puestos del mundo está ocupados por ciudades europeas. Las tres capitales europeas más importantes, Berlín (13), París (39) y Londres (41) mantienen sus posiciones, mientras que Madrid sube tres puestos (hasta el 46) y Roma asciende uno (56). Minsk (188), Tirana (175) y San Petersburgo (174) continúan siendo las ciudades europeas peor posicionadas, mientras que Sarajevo sube tres posiciones (hasta la 156) gracias a un descenso de su tasa de criminalidad.
La ciudad más segura de Europa es Luxemburgo (1), seguida por Basilea, Berna, Helsinki y Zúrich, todas ellas compartiendo el segundo lugar. Moscú (200) y San Petersburgo (197) fueron las ciudades europeas menos seguras este año. Las caídas más pronunciadas en Europa Occidental entre 2005 y 2019 han afectado a Bruselas (47), por los ataques terroristas, y a Atenas (102), por la lenta recuperación económica y política que ha seguido a la reciente crisis financiera global.
América
En América del Norte, las ciudades canadienses continúan siendo las mejor valoradas, con Vancouver (3) en el puesto más alto en calidad de vida global y compartiendo, en el de seguridad, la posición 17 compartida entre Toronto, Montreal, Ottawa y Calgary. Todas las ciudades de Estados Unidos analizadas pierden posiciones este año, con Washington (53) experimentado la mayor caída. Nueva York (44) es la única que sube un puesto, porque las tasas de criminalidad en dicha ciudad continúan cayendo. Detroit sigue siendo la ciudad de Estados Unidos con peor calidad de vida, y la capital de Haití, Puerto Príncipe (228), la que más baja la peor posicionada en América. Los problemas de estabilidad interna de Nicaragua y las manifestaciones que se produjeron en dicho país han provocado que Managua (180) caiga siete puestos en calidad de vida este año, y la violencia y elevada criminalidad relacionadas con los cárteles de la droga (mexicanos) han hecho que Monterrey (113) y Ciudad de México (129) permanezcan en posiciones bajas.
En América del Sur, Montevideo (78) vuelve a aparecer en lo más alto en cuanto a calidad de vida mientras que Caracas (202) cae nueve puestos en calidad de vida y 48 (hasta el 222) en seguridad, lo cual la convierte en la ciudad menos segura de América. La calidad de vida de otras ciudades importantes no sufrió modificaciones significativas respecto al año pasado, con Buenos Aires en el 91, Santiago en el 93 y Río de Janeiro en el 118.
Oriente Medio y África
Dubái (74) sigue en lo más alto del ranking de calidad de vida en Oriente Medio, seguida muy de cerca por Abu Dhabi (78); mientras que Sana’a (229) y Bagdag (231) ocupan los puestos más bajos en dicha región. La apertura de nuevas instalaciones de ocio con motivo de la Saudi Vision 2030 de Arabia Saudí ha hecho que Riad (164) escale una posición este año, y la disminución de la tasa de criminalidad y ausencia de atentados durante los pasados doce meses en Estambul (130) que esta ciudad suba cuatro posiciones. Las ciudades más seguras de Oriente Medio son Dubái (73) y Abu Dabi (73). Damasco (231) es la ciudad menos segura, tanto de Oriente Medio como del mundo.
En África, Port Louis (83) es la ciudad con mejor calidad de vida y, a la vez, la más segura (59). Muy cerca de ella, en cuanto a calidad de vida global, aparecen las ciudades sudafricanas de Durban (88), Ciudad del Cabo (95) y Johannesburgo (96), aunque se trata de ciudades que aún puntúan bajo en cuanto a seguridad personal; además, problemas como el de la carestía del agua contribuyeron a que Ciudad del Cabo cayese una posición este año. En el extremo opuesto, Bangui (230) ocupa la posición más baja del continente en calidad de vida y seguridad personal (230). Los avances de Gambia hacia un sistema político democrático y sus mejoras en el ámbito de las relaciones internacionales y los derechos humanos hacen que Banjul (179) experimente la mayor mejora de este año en calidad de vida en África (y en el mundo entero) y escale seis posiciones.
Asía-Pacífico
En Asia, Singapur (25) tiene la calidad de vida más alta, seguida por cinco ciudades japonesas: Tokio (49), Kobe (49), Yokohama (55), Osaka (58) y Nagoya (62). Después, aparecen Hong Kong (71) y Seúl (77). Esta última sube dos posiciones gracias a haber recuperado su estabilidad política tras el arresto de su presidenta el año pasado. En el sudeste asiático, otras ciudades destacables son Kuala Lumpur (85), Bangkok (133), Manila (137) y Yakarta (142), y en China continental: Shanghái (103), Pekín (120), Guangzhou (122) y Shenzhen (132). De todas las ciudades del este y sudeste de Asia, Singapur (30) ocupa la posición más alta y Phnom Penh (199) la más baja en materia de seguridad personal. La seguridad sigue siendo un problema en las ciudades de Asia Central de Almaty (181), Tashkent (201), Ashgabat (206), Dushanbe (209) y Bishkek (211).
En el sur de Asia, las ciudades indias de Nueva Delhi (162), Bombay (154) y Bangalore (149) se mantienen sin cambios respecto del ranking de calidad de vida del año pasado que encabezaba Colombo (138). En el puesto 105 aparece Chennai como la ciudad más segura de la región y, en el 226, Karachi como la menos segura de todas.
Finalmente, Nueva Zelanda y Australia continúan obteniendo buenas puntuaciones en calidad de vida, con las ciudades de Auckland (3), Sídney (11), Wellington (15) y Melbourne (17), manteniéndose todas entre las 20 primeras. Todas las principales ciudades australianas se clasifican entre las 50 primeras en cuanto a seguridad, con Auckland y Wellington como las más seguras de Oceanía, ambas en la novena posición.