Es difícil imaginar a Tom Brady haciendo algo más que jugar futbol americano. Durante tres décadas ha llegado a la justa más importante de ese deporte y se ha consolidado como el jugador con más Super Bowls ganados en la historia.
Desde su primero hace casi 20 años, hasta su victoria este domingo suma siete ganados, pero en algún momento Brady no estaba seguro de si lograría su sueño de entrar a la NFL y preparó su cv, el cuál él mismo subió a sus redes sociales.
En el documento, destaca los dos veranos en los que trabajó como becario en Merrill Lynch mientras estudiaba en la universidad de Michigan y soñaba con llegar a las grandes ligas.
En el año 2000 fue elegido en la sexta ronda y el resto, es historia.
Este año, Brady también es el jugador mejor pagado en la NFL al haber firmado 25 millones de dólares de un contrato de dos temporadas y 50 millones de dólares garantizados, con la opción de sumar otros cinco.
Además, por su participación en el Super Bowl LIV, él y todos sus compañeros en los Tampa Bay Bucaneers se llevaron 255.000 dólares, mientras que aquellos en los Kansas City Chiefs, recibirán 187.000 según el acuerdo de negociación colectiva de la NFL con el Sindicato de Jugadores.