El nuevo edificio del One World Trade Center de Nueva York, que se encuentra a unas semanas de que se complete su construcción, ha arrebatado a la Torre Willis de Chicago, antes conocida como Torre Sears, el título del edificio más alto de Estados Unidos después de que un comité de expertos acabara con el debate de si debería tomarse o no como parte de la construcción la antena que corona la torre.
La torre, de 1.776 pies de altura (541,3 metros), que hoy se alza sobre el terreno donde hasta el 11-S lo hacían las Torres Gemelas, no recibirá el certificado oficial que lo corona como la torre más alta del país hasta que el edificio esté completamente terminado, aunque lo que sí se ha dado por finiquitada es la disputa sobre si iba a ser o no el edificio más alto de Estados Unidos.
El punto final a la discusión lo ha puesto el Consejo de Edificios Altos y Habitat Urbano (CTBUH, por sus siglas en inglés), cuyo Comité de Alturas se reunió el pasado 8 de noviembre en Chicago para analizar la presentación del propietario del diseño del One World Trade Center, así como del arquitecto jefe del proyecto, David Childs de Skidmore, Owings & Merrill (SOM) y de Ken Lewis, director de proyectos de SOM.
Los expertos se enfrentaron a dos temas principales para ratificar la altura del edificio de acuerdo a los criterios de CTBUH:
- La naturaleza de la estructura del mástil en la parte superior de la torre.
- La línea de referencia (punto final) para determinar la altura arquitectónica de la parte superior. Esta determinación se realizó a través del examen de diseño y los planos de construcción y prosiguió a través del diálogo de los 25 expertos del Comité de Altura.
De haberse considerado la antena solo como elemento transmisor, la Torre Willis de Chicago seguiría ostentando el título del edificio más alto de Estados Unidos.
La altura de 1.776 metros es además una cifra simbólica porque representa el año de la fundación de Estados Unidos, algo a lo que han dado mucha importancia no solo los artífices de la obra.
La Autoridad Portuaria de Nueva York, la organización Durst y los constructores de la torre han incidido en que el One World Trade Center es un edificio emblemático que representa la capacidad de recuperación de América. La decisión del CTBUH reconoce también el lugar que le corresponde al One World Trade Center en la historia, tal y como expresaron desde la Autoridad Portuaria, la organización Durst y SOM al conocer la decisión del comité de expertos.