Tras la consolidación de la sostenibilidad en la agenda, la búsqueda de la paz es otro factor indispensable para lograr un desarrollo sostenible, estable y próspero en el crecimiento de los países. Así, Mirabaud Asset Management e Interpeace establecieron en 2011 una alianza a largo plazo mediante la creación de un fondo compartido de inversión en países emergentes que, en la semana Building bridges, celebra su décimo aniversario.
«Sin paz, no hay crecimiento económico; y sin crecimiento económico inclusivo, no hay paz duradera», destacan desde ambas entidades. Las zonas en conflicto afectan a 57 países en la actualidad, lo que significa 1.800 millones de personas que se enfrentan a la pobreza y miseria económica. Esta cifra, de todo seguir igual que hasta ahora, se estima que alcanzará los 2.300 millones de personas en 2030; un tercio de los habitantes del planeta.
«Con demasiada frecuencia, la fragilidad y los conflictos recurrentes impiden un avance sostenido del desarrollo de estos países. Peor aún, disuaden a los inversores. Es fundamental ser capaces de mejorar el vínculo entre el trabajo por la paz (Objetivo de Desarrollo Sostenible número 16) y la inversión privada», explica Scott Weber, presidente de Interpeace. Por esta razón, «nos parecía natural establecer una alianza con una organización como Interpeace, que apoya los procesos de paz endógenos, favoreciendo las condiciones necesarias para la paz y la estabilidad duradera», añade Lionel Aeschlimann, CEO de Mirabaud Asset Management.
A través de un fondo compartido, Mirabaud AM ofrece a sus clientes la posibilidad de orientar una parte de los beneficios obtenidos a Interpeace, de la misma manera que el gestor de activos renuncia a una parte de sus honorarios a favor de esta ONG.