El 5 de octubre de 1804, a un día de arribar al puerto de Cádiz, cuatro fragatas españolas, Medea, Mercedes, Fama y Clara, cargadas con los caudales para la corona española, navegan en paz hacia las costas del Cádiz procedentes del Virreinato de Perú. A la altura del cabo San Vicente, al sur de Portugal, son interceptadas y atacadas por cuatro fragatas inglesas. En el ataque la nave española Nuestra Señora de las Mercedes explota violentamente hundiéndose al instante.
Dos siglos después parte de sus tesoros fueron extraídos de las profundidades del océano Atlántico por la compañía cazatesoros Odyssey, y con las miles de monedas sustraídas del lecho marino, también emergió la historia de este navío y de los 273 tripulantes que perdieron la vida.
Los sucesos ocurridos en el tornaviaje del Virreinato de Perú al puerto de Cádiz, así como el litigio emprendido por el gobierno español en contra de la empresa norteamericana Odyssey Marine Exploration por el saqueo del yacimiento arqueológico subacuático, son los hilos conductores de la exposición El último viaje de la fragata Mercedes.
Traída a México por la Secretaría de Cultura, a través del INAH, y por Acción Cultural Española (AC/E), los ministerios de Educación, Cultura y Deporte, así como de Defensa de España, la muestra exhibirá piezas recuperadas del pecio, entre ellas 30.000 monedas de las 600.000 rescatadas—algunas de ellas deformadas por el ataque—, herramientas de trabajo de la embarcación, cañones, retratos de Carlos IV y su esposa María Luisa de Parma, firmados por Francisco de Goya, y una bandera de más de seis metros de largo utilizada en la batalla de Trafalgar, que era muy similar a la que llevaba el buque de guerra al momento del ataque.
En la exposición también se podrán observar documentos históricos, como los planos elaborados por los marinos a bordo y que señalan los puntos que visitó el navío durante su viaje de ida y vuelta; el listado de los 48 sobrevivientes del naufragio y testimonios de algunos de ellos; la orden que dio el primer ministro y generalísimo de Mar y Tierra, Manuel Godoy, al ministro de Marina, Francisco Pérez de Grandalla, para organizar una escuadra de guerra que recogiera los tributos de la Real Hacienda de Lima y llevarlos a España; además de una reproducción a escala del buque de guerra, entre el conjunto de piezas originales de los siglos XVIII y XIX.
La exhibición se complementa con material audiovisual de la batalla, que sirve como introducción a la muestra, elementos escenográficos de realidad aumentada e interactivos que permiten al visitante conocer la historia a través de un viaje al pasado y vivir la experiencia de navegar y combatir en una fragata española en los albores del siglo XIX.
El último viaje de la fragata Mercedes estará hasta el 2 de octubre en la Sala de Exposiciones Temporales del Museo Nacional de Antropología en un horario de martes a domingo de 9:00 a 19:00 horas.