El próximo 20 de marzo se celebra el Día Mundial de la Felicidad. En un contexto como el actual, donde convivimos con múltiples crisis a todos los niveles, pudiera parecer que ser feliz es más complicado que nunca, pero nada más lejos de la realidad. Cada año Ipsos publica su estudio sobre la felicidad y en esta edición vemos que la cantidad de gente que se declara feliz es cada vez mayor.
El estudio anual sobre la felicidad mundial arroja algo de luz sobre la evolución de este aspecto en los países alrededor del globo. La principal conclusión es que en general, a nivel mundial, la gente se siente más feliz que en años anteriores. De media, en los 32 países analizados, el 73% de la población adulta mundial se declara feliz, experimentando un crecimiento de 6 puntos respecto al año pasado.
España deja de ser uno de los países más infelices de Europa
La felicidad en España también ha aumentado, en este caso de forma más llamativa, 14 puntos respecto al año pasado, 7 de cada 10 personas se declaran felices. Esta subida confirma la tendencia alcista de la felicidad en el país de los últimos años, siendo el dato más alto de la última década. Así, España pasa de ocupar el penúltimo puesto en el ranking europeo a estar en quinta posición, solo por detrás de Países Bajos, donde un 85% de la población lo es, Portugal, con un 79%, y Francia y Suecia, con un 74% ambas.
¿Qué factores determinan la felicidad?
La felicidad siempre ha estado marcada por multitud de factores, muchos de ellos fuera de nuestro control individual, pero que de un modo u otro tienen la capacidad de impactar en cómo de felices nos sentimos. Aunque la carga personal es muy alta a la hora de definir qué nos hace felices, sí hay un consenso global sobre los aspectos más importantes.
Los tres factores que más felicidad nos proporcionan en todo el mundo son ‘sentir que la vida tiene sentido’, ‘percibir que tienes el control de tu vida’ y tener salud y bienestar mentales. Un factor, este último, que a raíz de la pandemia se ha situado entre los más importantes, incluso más que la salud física, que el año pasado ocupaba el primer puesto y este año desciende hasta el undécimo.
Cuanta mayor satisfacción tengamos con estos tres factores, se entiende que más felices seremos. A nivel global, de media, un 73% percibe que su vida tiene sentido y que tiene el control sobre la misma, un porcentaje que coincide con el dato de España, situándose así entre los países europeos donde más población está satisfecha con su vida. En cuanto a la salud y bienestar mental, de media en los 32 países, un 72% está satisfecho, y en España es un 75%, el segundo dato más alto en Europa después de los Países Bajos (84%).
Si seguimos avanzando en la lista de factores que más impactan en nuestra felicidad encontramos que completan el top 10: vida social, condiciones de vida, estatus social, sentirse apreciado, situación personal financiera, posesiones materiales y sentirse amado. En 9 de ellos España supera el 70% de satisfacción, salvo en la parte de situación personal financiera, donde encontramos que la satisfacción general baja hasta un 61%, siendo uno de los factores donde menos satisfecha está la población española, junto con los factores de situación económica, social y política del país. Aun así, España se sitúa como el segundo país de Europa donde más gente está satisfecha con su situación financiera, solo superados por Países Bajos (80%) y al mismo nivel que Portugal.
Los resultados están basados en las encuestas realizadas a 22.508 personas de 32 países entre el 22 de diciembre de 2022 y el 6 de enero de 2023, de las siguiendo esta línea de perfiles entrevistados; adultos de 18 a 74 años en Estados Unidos, Canadá, Malasia, Sudáfrica y Turquía, de 20 a 74 años en Tailandia, de 21 a 74 años en Indonesia y Singapur, y de 16 a 74 años en otros 24 países, a través de la plataforma de encuestas en línea Global Advisor de Ipsos.
La muestra de cada país consta de unos 2.000 personas en Japón; 1.000 en Australia, Brasil, Canadá, China (continental), Francia, Alemania, Gran Bretaña, Italia, España y Estados Unidos, Gran Bretaña, Italia, España y EE.UU.; y unos 500 en Argentina, Bélgica, Chile, Colombia, Hungría, India, Indonesia, Malasia, México, Países Bajos, Perú, Polonia, Portugal, Arabia Saudí, Singapur, Sudáfrica, Corea del Sur, Suecia, Tailandia, Turquía y los Emiratos Árabes Unidos.
Las muestras de Argentina, Australia, Bélgica, Canadá, Francia, Alemania, Gran Bretaña, Hungría, Italia, Japón, Países Bajos, Polonia, Corea del Sur, Polonia, Corea del Sur, España, Estados Unidos, Suecia y Suiza son representativas de la población adulta menor de 75 años de estos países.
Por su parte, las muestras de Brasil, Chile, China, Colombia, India, Indonesia, Malasia, México, Perú, Arabia Saudí, Singapur, Sudáfrica, Tailandia, Turquía, y los EAU son más urbanas, más cultas y/o más prósperas que la población que la población general. Los resultados de estas encuestas deben considerarse como un reflejo de las opiniones del segmento más ‘conectado’ de su población.