Francisco González, presidente de BBVA, ha presentado en el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), el libro “Cambio. 19 ensayos fundamentales sobre cómo Internet está cambiando nuestras vidas”. Esta obra, que recoge las reflexiones de destacados especialistas procedentes de diferentes campos de conocimiento, es la sexta entrega de la serie anual de libros editada por BBVA y dedicada a explorar las cuestiones decisivas de nuestra época.
Durante la presentación, el presidente de BBVA resaltó la importancia de OpenMind, una comunidad digital de conocimiento sobre ciencia, tecnología, economía, medio ambiente y humanidades. Su puesta en marcha hace tres años define el compromiso de BBVA para mejorar la vida de las personas en las sociedades donde opera. “Es un lugar para compartir, discutir e intercambiar conocimientos de un modo abierto, democrático y colaborativo”.
Francisco González ha destacado que “Internet está transformando radicalmente la economía y los negocios. Prácticamente todos los negocios de cualquier parte del mundo se van a ver obligados a hacer frente a esta revolución de la información”.
Las finanzas han sufrido hasta el momento una transformación infinitamente menor porque se trata de un sector muy regulado, con clientes de más edad y porque el enorme crecimiento que experimentó en las décadas anteriores a la crisis ha permitido mantener grados de ineficiencia relativamente altos. “Pero el tsunami del cambio está a la vuelta de la esquina”, advierte Francisco González. “Y está surgiendo una nueva liga de competidores, en su mayor parte, aunque no exclusivamente, procedentes del mundo digital”.
En opinión de Francisco González, esta transformación constituye un enorme reto, pero también una magnífica oportunidad para los bancos actuales, porque el mercado va a ser verdaderamente universal, y van a participar miles de millones de personas que hoy no tienen acceso a los servicios financieros. Además, “los bancos podrán expandir su oferta más allá del ámbito financiero a una gama potencialmente infinita de productos y servicios basados en el conocimiento”.
En el Grupo BBVA, “hemos trabajado durante los últimos siete años para llevar a cabo el cambio que considero más urgente en nuestra industria: pasar de ser un banco analógico, muy eficiente y rentable para los estándares del siglo XX, a convertirnos en una empresa digital de servicios del conocimiento, a la altura de los estándares más elevados y exigentes del siglo XXI”.
Junto al presidente de BBVA han participado en la presentación los también autores del libro Thomas W. Malone, catedrático de la Sloan School of Managemet del MIT y director del MIT Center for Collective Intelligence, y Yochai Benkler, catedrático de Derecho Empresarial de la Universidad de Harvard.
Thomas Malone ha centrado su intervención en el cambio que está sufriendo nuestra forma de trabajar. El catedrático del MIT defiende que nos encontramos ante una revolución en el mundo de los negocios que puede ser tan profunda como la Revolución Francesa lo fue para el gobierno de los países y que, por primera vez en la historia, las nuevas tecnologías nos permiten disfrutar de las ventajas económicas de las grandes organizaciones sin perder libertad, creatividad, motivación y flexibilidad.
Como consecuencia de esta transformación, las empresas se van a ver obligadas a introducir cambios radicales en la gestión de los recursos humanos para crear organizaciones mucho más descentralizadas y con mayores niveles de libertad. Cada vez son más las personas que tienen a su alcance la información que necesitan para decidir libremente y llevar así sus propios valores a la forma de hacer negocios. Y eso supone –en opinión de Malone– que los valores, tanto económicos como humanos, se situarán en el centro de nuestra manera de pensar los negocios.
Sobre esta transformación en nuestra forma de trabajar, Yochai Benkler añade que Wikipedia y el software libre de código abierto son ejemplos de cómo el flujo libre y abierto de información a través de la red ha dado lugar a nuevos modos de producción que tratan la innovación y la creatividad como bienes comunes, y estimulan el cambio económico y social.
En opinión de Benkler, la innovación organizativa más significativa de todas las surgidas de la generalización de Internet es la producción entre pares, que permite que muchas personas distintas, con motivaciones diferentes, colaboren en proyectos compartidos para producir artículos más complejos de los que habrían sido capaces de crear de forma individual.