El Día de Muertos en México es una importante fiesta reconocida desde hace 15 años como: Obra Maestra del Patrimonio Cultural Oral e Inmaterial de la Humanidad, por la Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (Unesco).
La pérdida de un ser querido, suele ser un momento difícil para la mayoría de las familias y personas que enfrentan el proceso de duelo. Y ésta, se convierte en una situación aún más complicada cuando no se cuenta con los recursos o protecciones existentes para saldar el duelo.
En ese sentido, la importancia del día de muertos en el bienestar emocional del mexicano consiste en honrar la vida y la muerte de los seres queridos, por lo que es también motivo de reunión familiar desde una connotación festiva y no tanto dolorosa. Las personas recuerdan a sus seres queridos fallecidos a través de ofrendas en las que está presente la comida favorita del difunto, flores, canciones, etcétera.
«La cultura de la prevención en desarrollo de México nos ha recordado en diferentes momentos históricos, como en los pasados sismos del S19 de 2017, la vulnerabilidad con la que vivimos los mexicanos, ante la repetición de uno de los eventos naturales más relevantes en su tipo de los últimos años», aseguró Francisco Oliveros, CEO de Seguros SURA en México.
Durante 2017 en México se contabilizaron, un total de 703.047 muertes, de las cuales el 56,1% fueron hombres y el 43,8% mujeres, según lo informó el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI). Además del total de defunciones, el 88,6% se debieron a enfermedades y problemas relacionados con la salud, mientras que el 11,4% fueron por causas externas, principalmente accidentes, homicidios y suicidios.
“En general, el mexicano no ve la muerte como algo que le va a pasar. Eso les pasa a otros, es una frase de evasión muy común, especialmente en el género masculino. Sabemos que vamos a morir, pero no hablamos de ello. No nos prevenimos, no tomamos la salud en serio, además no tenemos la cultura del autocuidado, o no protegemos a la familia” comentó Yoli Martinez, tanatóloga y directora de la Comunidad de Apoyo de Cristal y de Roca.
Ante la posibilidad de una pérdida existen facilitadores que nos ayudan a procesar el duelo de manera saludable, los facilitadores emocionales los podemos encontrar en una red de apoyo, que puede ser la familia, los amigos, la comunidad religiosa, la psicoterapia, o los grupos de apoyo psicoterapéutico especializados. “Del duelo se sale mejor librado en compañía de gente que nos valide la experiencia, nos escuche sin juzgarnos, nos contenga, nos permita llorar, o expresar nuestro enojo, frustración, miedos, etcétera”, explica Martínez.
Por su parte, los facilitadores económicos consisten en no tener deudas, tener seguros como de vida, o de gastos funerarios, que nos permitan anticipadamente tener cubiertos los gastos derivados a este suceso. Ya que, de acuerdo con SURA, una de las principales preocupaciones que nos asaltan al momento de pensar en la muerte, es la de dejar a nuestras familias fuera de toda inquietud financiera.
«El Seguro de Gastos Funerarios busca acompañar el duelo dentro de un momento difícil de asimilar para las personas, con el fin de que generar resiliencia en los beneficiarios, a través de la aplicación de las coberturas en la gestión de trámites administrativos y traslado del cuerpo a la funeraria dentro de la localidad, municipio o zona conurbada donde éste se encuentre. Asimismo, cuenta con preparación estética del cuerpo, ataúd, uso de sala de velación, cremación del cuerpo y urna en su caso. La conmemoración del día de muertos, es un ejercicio de prevención, ya que contar con una póliza de Gastos Funerarios, incluso microseguros; adicional a ser un respaldo ante los gastos derivados de la pérdida de un ser querido, es un soporte ante los factores económicos, sociales y culturales circundantes a la pérdida de un ser querido», menciona la firma.
Seguros SURA, recomienda además de contar una póliza como esta, contar con un testamento actualizado, comunicar a algún familiar cercano que las coberturas con las que se cuenta, así como informar sobre los preparativos en caso de fallecimiento.